( 09 ) un entrenamiento especial.

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Airi se encontraba decidida en empezar a ir a un gimnasio para poder entrenar de verdad, en lugar de entrenar en su casa como lo había estado haciendo durante varios años

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Airi se encontraba decidida en empezar a ir a un gimnasio para poder entrenar de verdad, en lugar de entrenar en su casa como lo había estado haciendo durante varios años.

Lo que la motivó fueron los incidentes que pasaron con Yui y Zoe, quería hacerse más fuerte que los patanes que las atormentaron y poder darles su merecido a ese tipo de personas.

Una vez que recogió todos los elementos necesarios y se puso una ropa adecuada, Airi se dirigió a la salida. El gimnasio no estaba demasiado lejos, así que decidió ir a pie, eso también la ayudaba a despejar la mente.

Ingresar al gimnasio y crear una membresía fue rápido, ya que el chico detrás del mostrador fue bastante amable y rápido en ordenar los detalles necesarios.

Una vez dentro, Airi se percató de que no había gente. Era mediodía en un día laboral, seguro la gente estaba en la escuela o en el trabajo . Las personas que estaban presentes eran mayores, aunque habían algunas de su edad, o quizás un poco más mayores.

Airi se dirigió a la cinta y comenzó con su cardio. No supo cuanto tiempo corrió sin descasar, pero no se detuvo, fue como si estuviera huyendo de sus problemas pero éstos la estaban alcanzando poco a poco.
Lo único que logró sacar a Airi de su trance fue el nuevo individuo que entró al gimnasio y que su presencia la atrajo de inmediato.

Era un hombre alto de cabello negro oscuro, corto a los lados, esponjoso y largo en la parte superior. El cabello le cubría ligeramente su ojo derecho y le daba una especie de aura misteriosa. Tenía la piel clara y su cuerpo era bastante delgado y bien tonificado.
Airi no pudo quitarle la vista mientras que él se acercaba a las pesas, no cuando era extrañamente atractivo.

Las mujeres que también se encontraban en el lugar lo miraban de igual forma, susurrándose cosas mientras que soltaban risitas traviesas.

Airi decidió desviar su mirada y seguir con su ejercicio, estuvo así unos cuantos minutos más, hasta que no pudo seguir y se dio su merecido descanso.
Tomando del agua de su botella, se armó de valor de acercarse a aquel tipo, quien elevó su mirada al verla caminar hacia él, también parecía estar tomándose un descanso.

—Hola, disculpa...—lo saludó ella con algo de timidez—Soy nueva en el gimnasio y me preguntaba si podrías ayudarme a ser mi observador mientas hago pesas.

—¿Eres nueva? Seguro, te ayudaré—sonrió él elegantemente antes de alejarse de su lugar y permitir que Airi tomara el sitio. Su movimiento fluia con elegancia y su aura general le recordó a como se movía y actuaba DG.

Hablando de DG, Airi había olvidado por completo lo que Goo le había dicho de que él quería hablar con ella. Esperaba poder recordarlo más tarde.

Al colocar las pesas en su lugar, el hombre arqueó una ceja al ver que Airi agregaba más peso.

—¿Segura que estarás bien? Eso parece un poco pesado—preguntó y Airi asintió con la cabeza vigorosamente.

Agarrando la barra, Airi respiró de manera profunda antes de comenzar a hacer press de banca. Después del primer press, el hombre asintió con la cabeza, impresionado de que ella realmente pudo levantar tanto peso.

𝗟𝗢𝗩𝗘 & 𝗪𝗔𝗥 - lookismDonde viven las historias. Descúbrelo ahora