𝗟𝗢𝗩𝗘 & 𝗪𝗔𝗥 ♥︎
Gun accidentalmente recoge y ayuda a una joven huérfana de la calle sin hogar llamada Jeon Airi para poder entrenarla.
Quien diría que eso traería muchas consecuencias.
Advertencia: Se tocan temas muy delicados, leer bajo su pro...
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Maratón 2/3.
Dos semanas de paz pasaron rápido. Kitae había regresado a Corea y reanudaron su habitual acuerdo contractual de reunirse por placer. El tobillo de Airi se recuperó rápidamente después de un par de días de descanso; finalmente, la chica insistió en volver a trabajar a pesar de los sermones de Vasco y Jace. Airi y Gun todavía se reunían semanalmente para ponerse al día y pasar el rato, creando un pequeño conflicto en Airi.
Con su contrato con Kitae y las aventuras con Jake, Airi estaba bien, pero... ¿Por qué no podía dejar de pensar en Gun y desearlo? Con aquellas miradas cruzadas y los pequeños roces y toques, Airi no podía evitar quererlo más.
Se estaba volviendo loca.
Jiho, Zoe y Duke habían estado yendo constantemente a la tienda de conveniencia para pasar tiempo con el pequeño Daniel. A Airi no le molestaba, de hecho, le ponía feliz que Daniel haya estado haciendo más amigos.
Aunque sospechaba que a Zoe le gustaba Daniel de otra manera en vez de amigo.
—Pasó algo extraño—de pronto, el pequeño Daniel le dijo a Airi.
—¿Uh? ¿Qué cosa?
—Jiho me pidió dinero.
La chica frunció el ceño por lo dicho y se apoyó en el mesón, haciendo una mueca pensativa.
—Ahora que lo pienso, Jiho ha estado actuando algo extraño últimamente...—dijo soltando un suspiro—Me da miedo que se esté metiendo en cosas extrañas.
—¿Cosas extrañas? ¿Cómo qué?—se extrañó el pequeño Daniel.
—No lo sé...
Airi se puso a revisar el dinero de la caja y sus ojos se abrieron en demasía al percatarse de que faltaba, hasta que su mirada captó algo pegado en el mesón.
—Oye, Daniel... ¿Dijiste que Jiho te había pedido dinero?
—Sí, ¿por qué?
La chica agarró la nota que estaba pegada en el mesón y se la mostró al contrario.
"Daniel, Airi. Me llevé dinero prestado, perdón".
A Airi estaba comenzando a fastidiarle el comportamiento de Jiho. Con lo poco que habían compartido, trató de entenderlo, pero simplemente no podía. Se preguntaba qué estaba haciendo en aquel momento, sacando dinero de la caja de su trabajo y actuando más extraño de lo normal.
✵
—Airi, Daniel... ¿Cómo es que pasó esto? El dinero de la caja...—su jefe habló, haciendo sudar a los dos mencionados y a Zoe, quien los acompañaba—¡Hoy no falta ni un centavo! Siempre falta un poco, pero hoy está exacto. Me voy, así que pueden limpiar e irse.
