Solo una vez.

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Parpadeando lentamente sergio abrió los ojos, la vista del techo que lo recibió no era del mismo color blanco familiar del de su hotel el cual ahora siente que no valoro lo suficiente anteriormente.

Este era un blanco apagado, vacío, un blanco triste, penso que en realidad estaba describiendo su estado de ánimo actual.

Le dolía la cabeza, le ardían los ojos pero estos malestares no se comparaban al que albergaba su corazon.

El pecoso recapitulo todos los eventos ocurridos anteriormente, la llamada con Max, su visita en el antro, alcolizarse asta mas no poder, armar una escena tan nefasta con aquel desconocido, la discusión con Max, la repentina escena del nuevo novio de Max, dios! era demasiado para asimilar.

Sergio sonrió bajito, todo era una mierda
Las situaciones que el solo se acarreo, las malas carreras, los sentimientos que tenia hacia Max........Max? Saboreo el nombre al repetirlo, cuando dejó de decirle tio?.

La situacion actual era un asco, el era un asco, si Max se enteraba o se daba cuenta de los sentimientos que sergio albergaba hacia el esta más que seguro que su relacion sería cortada inmediatamente y eso es algo que lo asustaba mucho.

Sergio no quiere ni puede seguir haci, pero sinceramente no sabía como lidiar con esta situación, tenía que poner un límite con el tema de Max, el tenía que ponerse un límite propio.

El entendia que dejar de querer a alguien no era un trabajo fácil, pero de momento solo tenía dos opciones, deprimirse, llorar y solo dormir o saturar su tiempo de trabajo para haci olvidarse o tratar de hacerlo, lo bueno es que siempre que algo lo agobiaba, la segunda opción le funcionaba de maravilla, lo hizo cuando sus padres se separaron, no había razón para no hacerlo ahora.

Dejando de lado sus pesares miro su nueva habitación temporal.
Por la gran ventana de su habitación se filtraba una luz palida que apenas si alcanzaba a iluminar, aún no amanecía completamente, dio gracias a dios por no haberse quedado dormido.

levantándose lentamente asta quedar sentado en la cama y recargando su espalda en la cabecera, escaneo con la mirada toda la habitación buscando su teléfono que esperaba no se haya apagado.

Rápidamente lo encontró a sus pies medio escondido entre la sabana que apenas si movio cuando se subió sobre ella.

Su pobre celular estaba a nada de apagarse, la hora en la pantalla le marcaba las 6 de la mañana...mierda!! solo durmió 3 horas y las durmió horrible por que el cuerpo le dolía de manera fatal, la falta de sueño la hiba a pagar durante el día

Recordó vagamente el comentario que  Max le menciono mientras lo regañaba sobre algun video exponiendolo, se dio a la tarea de buscar en varias páginas si alguien más lo grabo y expuso pero gracias a los dioses no había ninguna nota atacandolo sobre su manera de pasar el tiempo, soltó un suspiro, de alguna manera todo estaba tranquilo ahora.

De momento tenía que levantarse, tiene que estar en el paddock a las 9 para ajustar cambios y todas esas cosas, por que alas 10 es la última practica y una hora más tarde la clasificación, tal vez después tenga tiempo para seguir lamentándose

El pecoso detecto un aroma desagradable a sudor, alcohol y perfume, rápidamente se dio cuenta que el mal olor provenía de él, soltó un pequeño quejido de cansancio, no tenía ropa a la mano para cambiarse y no quería esperar con sólo una toalla a la cintura y tampoco quería pedirle nada a su anfitrión.

Recordó que Max le habia dicho que le hiban a traer sus cosas temprano, bueno supone que no tan temprano pero no pierde nada en intentarlo e investigar un poco.

Pero no quería salir de la habitación y toparse con Max o su noviecito, la situacion hiba ser muy incomoda, bueno para el más que nada, pero tampoco se hiba a esconder de hecho no tenía por qué hacerlo, realmente ocupaba sus cosas.