̶I̶ ̶w̶̶a̶̶n̶̶n̶̶a̶ ̶b̶̶e̶ ̶y̶̶o̶̶u̶̶r̶̶s̶ 𝘔𝘢𝘬𝘦 𝘠𝘰𝘶 𝘔𝘪𝘯𝘦

07

A Yoongi nunca le preocupo su estilo, menos si su trabajo era en una empresa donde lo único que variaba era el color de sus trajes diarios, y la única variación eran el color negro y gris que se intercalaban.

Por defecto, le importaba demasiado verse bien para Jimin y más si su cita era en una fiesta.

Nunca se habían visto con ropa informal ninguno de los dos, por lo menos no en persona. Yoon como el buen stalker que era miro varias fotos de Jimin y su vestimenta, el maldito tenía estilo por lo que realmente quería darle una buena impresión.

Cuando salió de su edificio sintió el aire chocar contra su piel y no pudo evitar preguntarse si su ropa se miraba inadecuada para el clima al no ponerse una chaqueta encima. Sus dudas se esfumaron cuando localizo a Park Jimin.

Estaba recargado contra un vehículo negro mientras escribía en su celular, Yoon aprecio eso porque no tenía idea de cuanto tiempo habia estado admirando a Jimin a la corta distancia.

El castaño mantenía un peinado más elaborado, dejando su frente al descubierto, jeans ajustados negros y una camisa de manga larga de brillos transparente color rosa que dejaba entre ver su apetecible abdomen.

Cuando Yoongi salió de su impresion se acercó a el, intimidado ante el aura tan sexy que emanaba.

Mierda.

Debió de ponerse algo más laborioso.

Min carraspeó llamando la atención de Jimin, al levantar su mirada el mayor observo su maquillaje rosado sutil en sus ojos, sus labios parecían también tener brillo labial y algo de rubor.

—Dios, te ves— Yoon trago saliva para poder hablar —tan..— el palido no pudo encontrar la palabra para describirlo, solo se dedicó a negar con su cabeza mientras lo observaba.

Jimin solto una sonrisa sin dientes ante su impresión.

—Lo se pero, gracias— dijo guardando su teléfono en su bolsillo trasero.

Se acercó a Yoongi quien vestía un pantalón negro cargo, una camisa del mismo color con una cadena de plata colgando en su cuello y algunas por los bolsillos de sus pantalones, y con su cabello algo lacio, totalmente libre de gel.

Min no llevaba maquillaje y Jimin podía deducir que no era el estilo del mayor pero daba igual, no lo necesitaba, el se miraba hermoso siempre.

La mano de Park se posicionó en la mejilla de Yoongi para besarlo y proceder a decirle después lo bello que lucia, sin embargo, unas manos en su cintura lo detuvieron.

—¿A donde vas?— cuestionó Yoongi.

—A un lugar que me gustaría explorar más a fondo— susurro Park de una forma seductora, esta vez tomando el mentón del pálido.

Yoongi lamió sus propios labios, tentado a atacar los labios rechonchos que tenía a escasos centímetros.

—Dijiste que estábamos en la misma sintonía ¿No? Esto parece algo más  casual—

—Bueno, después de la situación en tú oficina diría que darnos un beso es la acción más inocente que podemos hacer ¿no lo crees?—

—Nada de besos— alertó Yoongi.

Jimin tuvo que morderse la lengua para no contestarle con una vulgaridad. Aún no terminaba de mostrarse por completo con el palido.

—¿Por qué no?— un puchero en sus regordetes labios se hizo presente.

—Porque me gustas— el mayor se alejo de el —me gustas de verdad, y quiero que tengas claro que no estoy jugando—

Está vez Jimin no pudo responder, Min espero un sonrojo de su parte pero lo único que Park hizo fue mirarlo de una manera que no supo descifrar.