SOPHIE
Los latidos de mi corazón son tan bruscos, tan rápidos, tan veloces... Que me hacen pensar que se me va a salir del pecho. Pero no son latidos de amor, de alegría o de ilusión, son latidos de ansiedad, de pánico absoluto. Son el tipo de latido en que el corazón se obliga a darlo todo, porque si no se queda petrificado en cuestión de unos instantes. Son el tipo de latidos que se adquieren tras haber sufrido la pérdida de tu vida.
Pues así me siento yo al no haber aprovechado la mejor oportunidad que se me ha brindado, la oportunidad de tener a una persona que me quiera de verdad, a pesar de todos mis defectos, inseguridades y miedos. La persona que me entregó su corazón a mano abierta y yo lo dejé bombeando, pero la sangre sin llegar a ningún lado, porque soy demasiado miedica, cobarde y mentirosa. Mentirosa, eso es lo que mi cerebro sigue repitiéndome mientras me encuentro paralizada en la pista con los ojos llenos de lágrimas, segundos después de haber presenciado el mayor robo de mi vida, porque aunque aquella chica no me haya robado el corazón, al haberme robado a Olivia, se ha llevado la mayor parte de él. Ladrona seductora, devuélveme a mi chica.Me siento inservible, estúpida, reemplazable. Pero sobre todo mentirosa tras haberme dicho mil veces que ya iba vencer mis estúpidos miedos a salir del armario e iba a recuperar a la chica de mis sueños.
Poco a poco, la presión en mi pecho aumenta al igual que los latidos de mi corazón, el nudo de mi garganta me estrangula lentamente, apoderándose de la vulnerabilidad de mi mente. Mi mirada permanece en Olivia, que inmediatamente se ha separado de la chica arrepentida, y cuando nuestras miradas se cruzan, no encuentro ni deseo, ni adoración ni amor; en su lugar hay dolor, traición y resentimiento. Estos oscuros sentimientos provocan que se produzca la esperada
explosión, pero no es de sabores ni de sensaciones como hubiera deseado que fuera, es la explosión de mi alma, rompiéndose en mil pedazos al ver a la chica de mis sueños siendo besada por una simple mujeriega. Y en cuestión de unos instantes, me encuentro corriendo descontroladamente por el pasillo del local, desesperada por encontrar un lugar seguro donde poder derramar miles de lágrimas sin ser juzgada, pero supongo que en esto siempre llego tarde, porque en cuanto menos me lo espero, el rímel de mis ojos ya está dejando un oscuro trazo sobre mi rostro, haciéndolo ver incluso más siniestro de lo que ya parecía. A estas alturas, las voces me obligan a acelerar el paso, pero supongo que mi ansiedad siempre será más fuerte, y en lugar de acelerar mi paso, se encarga de acelerar mi respiración, y mi pulso, por supuesto, queriendo hacerme perder el control, pues al parecer no va nada mal. Tras lo que parece una eternidad, me encierro en el baño de un portazo y el océano de lágrimas acumuladas en lo más profundo de mis ojos comienza a caer como lluvia torrencial. La guerra que se ha dado lugar en mi mente no ha hecho más que empezar, y ahora me encuentro tirada en el suelo del baño mientras trato de controlar mi respiración entre sollozos y temblores.Minutos después, un grave estruendo interrumpe las agudas voces del fondo de mi mente. El nerviosismo de una dulce voz se cuela entre mis más oscuros pensamientos, tranquilizándolos de manera severa.
-Sophie, Sophie, is that you?-Repite Olivia tras haber casi tirado la puerta abajo de un golpe.
Su voz me calma, le brinda un poco de paz a este desastre, a esta guerra que se ha desatado entre mi cerebro y mi corazón, incluso sabiendo que ella es la principal causa.
No respondo, estoy demasiado concentrada en mantener un buen ritmo en mi respiración, no quiero acabar en el hospital como aquella vez. Una parte de mí quiere contestar, pero el nudo en mi garganta me lo impide. Por lo que mi llanto se vuelve más fuerte y condimentado, lo que preocupa a Olivia incluso más de lo que ya estaba y golpea la puerta del baño donde me encuentro, brutalmente pero con cierta delicadeza, contradictorio, ¿verdad?
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La Chica de la Habitación de al Lado
Teen FictionUna chica de 16 años se va de intercambio a Nueva York, allí vive el mejor año de su vida, pero suceden algunas cosas que no estaban planeadas... ⚠️: hay partes escritas en inglés.