Elisabeth, hija de Rapunzel y Eugene, siempre había sido aventurera.
Tras la llegada de los hijos de los villanos, su vida no volvería a ser como antes, sino mejor, y sería en cierto momento de pánico de Mal que ella vería una oportunidad para cumpl...
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La vuelta a la isla por parte del consejo real fue especialmente bonita.
*Lovers Rock - TV Girl*
Elisabeth, junto a Ben, Lucas y los cuatro de la isla, habían acudido para llevar libros y material necesario para la educación de los niños. Evidentemente, la princesa hizo uso del dinero dedicado al exterior de la Corona de Auradon para comprar todos los libros que les había recomendado a los piratas del bar, empaquetándolos lo más bonito que sabía y metiéndolos todos en varias cajas. También tenía que admitir que la mayoría de libros los había cogido de su propia colección, ya bien algunos que ya había leído o los que tenía de pequeña.
Cuando llegaron en la limusina, muchos niños acompañados de sus padres esperaban allí, pero también los nuevos amigos que Elisabeth había hecho.
Abriendo el maletero, todos cogieron cosas, y a ella le tocaron la infinidad de libros de lectura que había decidido traer, teniendo que sostener unas seis cajas bastante grandes una encima de la otra, creando una montaña que le impedía ver.
Pesaban bastante, no lo iba a negar, porque llevaba unos 100 libros en total, cincuenta de lectura para adultos como le habían dicho en el bar, pero también de niños para que pudiesen disfrutar como ella lo hizo.
Cuando dio unos cuatro pasos se dio cuenta de que iba a ser más difícil de lo que parecía, y antes de que pudiera pedir ayuda, las tres cajas de arriba se cayeron.
Elisabeth ya pensaba que le iba a tocar recoger libros del suelo, pero ningún estruendo sonó, dejándola confundida. Cuando apartó las cajas que seguía llevando de su cara, vio que Harry, el Harry al que no había visto en más de dos semanas, estaba allí con las otras tres sonriéndole.
-Harry, hola- dijo ella, limitando el impulso de ir a besarlo.
-Hola tesoro- dijo el con la misma mirada.
Ambos se quedaron apreciando al otro por un rato, hasta que alguien llamó a la chica y fueron hacia el lugar donde se iba a instalar el lugar de aprendizaje.
Cuando colocaron ya todos los libros en las estanterías, cada uno se ocupó de una cosa: Ben y Mal estaban con los más mayores enseñándoles cosas básicas, Evie se dedicaba a impartir clase a los niños pequeños ya que los estudios se le daban bastante bien, pero los niños mejor. Lucas por su parte, enseñaba a otro grupo de gente a cocinar recetas típicas y muy ricas que sabía preparar a la perfección. Jay enseñaba deportes variados a los niños sobretodo, pero también habían varios piratas que querían ponerse en forma como él. Por último, Elisabeth enseñaba arte, rodeada de miles de botes de pintura, colores de madera, pasteles, pinceles... El grupo de esta última era el más variado de todos, porque contaba con gente de todas edades, haciendo que Harry, al verla con niños pequeños, la quisiera más de lo que ya lo hacía.
