El príncipe y la joyera entre los pobres

El cofre y el primer encuentro

 Mientras tanto en los aposentos de la reina…
 
Rin: mi hija Aiko acaba de salir a bañarse al río?
 
Leonora: si mi señora. Su dama la está acompañando
 
Rin: ella y sus hermanos por lo menos están más relajados. Ouma por otra parte, esta nervioso por la llegada de su futura esposa. Le cuesta mantener conversación con las mujeres
 
Leonora: eso me lo ha mencionado mi reina. Pero seguro cuando conozca a la chica se le pasarán los nervios (ojalá no se le pasen nunca para que ahuyente a la chica😈)
 
Rin: eso espero. Sin embargo… después que le di esa idea a mi rey de que les diera su tiempo antes del matrimonio, para que se conocieran mejor… varios de los noviazgos de mis hijos van en orden. También quiero que sean felices
 
Leonora: es el mayor deseo de una madre
 
Rin: lo sé Leonora querida. Lo sé
 
 En la habitación de Ouma…
 
Ouma: y si no se como hablarle? Y si se me traban las palabras? Y si hago algo mal?!*nervioso*
 
Kichi: ya hermano! No seas idiota
 
Kumiko: *le pega* hey!
 
Kichi: que quieres que te diga hermana? Es verdad
 
Kumiko: pero así tampoco ayudas. Mira… yo como mujer te doy un consejo: a las mujeres nos gusta chicos verdaderos. Que no teman ser si mismos. Eres tierno hermano, y de corazón cariñoso, solo tienes que controlar la timidez, y listo
 
Beta: quien mejor para explicar eso que las mujeres
 
Lavander: mas fácil para ti agarrar el consejo porque tu no tienes novia
 
Beta: presumido
 
Kokichi: jeje, pero fuera de eso yo creo en ti
 
Ouma: de verdad?
 
Kokichi: ni-shi shi, obvio que no 😝
 
Kumiko: infantil 😒
 
Ouma: *pensativo*
 
 En el río por otro lado, se encontraban dos hermanos jalando una red que algo se le había atorado, y por lo visto, bastante pesado. Siguieron jalando, no les importó lastimarse un poco los pies. Al parecer no era ni un cardumen de peces, rocas o algo parecido. Lo que había en la red era un cofre del tesoro!
 
Jeremy: y esto?!
 
María: llevémoslo a casa. A ver que tiene adentro
 
Jeremy: a ver cuanto pesa *intentando levantarlo y a duras penas lo consigue* AHHG!!! Que pesado! *lo siente más ligero* ah?

María: nunca estarás solo hermano
 
Jeremy: gracias hermana. Después buscamos la red, llevemos esto a casa
 
María: vamos
 
 Se fueron caminando a pesar del peso lograron pasar por la parte trasera del pueblo y agarraron camino a casa. Tocaron la puerta y allí los recibieron Marijó y Jenny
 
Jenny: y eso?
 
Jeremy: lo encontramos en el río
 
Marijó: tiene candado
 
Jenny: por el agua debe estar oxidado. Con alguna herramienta pesada se puede romper
 
Jeremy: *trayendo un martillo* apártense *agarra fuerza y rompe el candado*
 
 Justo en ese momento, abren el cofre para ver su contenido. Al abrirlo, estaba lleno de monedas y piedras preciosas. No sé veían ni maltratados por el agua ni la suciedad del río. Estaban totalmente intactas

 
Jenny: miren esto!!! Prácticamente somos ricos
 
Marijó: esto nos alcanza para los siguientes meses. Debemos ir racionando
 
 La del medio por otro lado, mostraba más interés en las piedras y sus colores. Luego de examinarlas, se le ocurrió una idea
 
María: pásenme unas monedas, y la vasija del agua. Iré al mercado y volveré con el agua
 
Jeremy: que se te ocurrió hermanita?
 
María: lo sabrán cuando vuelva. Ya regreso *se va*
 
 La pelo corto salió rápidamente con un saco de monedas y la vasija para agua. El mercado era una zona que también era muy frecuentada por los nobles. De allí fue directamente a donde venden herramientas. Las pidió y unas pequeñas recomendaciones de parte del vendedor; después pagó y se fue de regreso a la villa  de los esclavos, al pozo a buscar agua. No se dio cuenta cuando estaba en el mercado, que allí estaban paseando los príncipes del rey Satoru. Entre ellos estaba el príncipe Ouma. Veía a lo lejos la entrada de la villa de los esclavos, sentía curiosidad por ellos, así que se escapó de donde sus hermanos para ir a ver. Caminó y caminó mirando a los alrededores, viendo como vivía esa pobre gente. No sabe que en un descuido, se tropezó con alguien, dejándole caer lo que era una vasija de agua
 
María: *molesta* Oiga que le pasa?! Mi agua
 
Ouma: disculpa… no te vi
 
María: pues mas cuidado por donde cami… *no terminó de hablar cuando vio quien era* m-majestad? *nerviosa* disculpe!!! No debí gritar

 
Ouma: no. Discúlpame tu. No noté que ibas apurada. Si quieres podemos ir a buscar tu agua
 
María: no, yo puedo sola. Además… seguro debe de estar ocupado
 
Ouma: no. Insisto
 
María: esta bien
 
 Ya cuando se calmaron las cosas, fueron al pozo más cercano. Muchas personas se preguntaban: que hacía uno de los hijos del rey Satoru en la villa de los esclavos? Y de paso con una de ellos. Recogieron agua y allí le preguntó:
 
María: no es que sea metiche majestad, pero… que hace por aquí?
 
Ouma: oh! Es que estaba en el mercado con mis hermanos, y de curiosidad vine para acá. No puedo creer en que condiciones viven ustedes
 
María: lamentablemente si. Es algo completamente diferente al lujo con el que están acostumbrados
 
Ouma: pronto voy a casarme y a reinar. Ahora que veo esto, cambiaré la ley para ustedes
 
María: eso sería maravilloso. Debo irme, me esperan en casa. Y… *sonrojada* gracias
 
Ouma: de nada. Yo también debo irme *se aleja* Adiós!!!
 
María: Adiós!!! *se va de regreso y sonriente*
 
 De regreso en su casa…
 
Marijó: hermana. Porque tardaste tanto?
 
María: tuve un pequeño problema en el camino. A que no adivinan a quien me encontré en la villa
 
Todos: quien?
 
María: al príncipe Ouma
 
Jenny: Como?! Y que hacía por aquí?
 
María: vino por curiosidad. De camino se tropezó conmigo y me tumbó la vasija. Pero… fue tan amable y se ofreció a ayudarme a buscar más agua ☺
 
Jenny: cuñada… trata de que ese encuentro y esa amabilidad no te ilusionen. Venimos de clases diferentes. Algo entre la realeza y la esclavitud es imposible
 
María: cierto *desanimada* pero… quieren oír mi idea?
 
Jeremy: dila
 
 Antes de que hablara, vació el saco, en su interior habían varias herramientas y un pergamino. Su familia se quedó algo confundida hasta que dijo:
 
María: voy a confeccionar joyas 💎