El príncipe y la joyera entre los pobres

Nueva vida

 Una vez que llegaban al palacio, la gente se preguntaba qué pensaban hacer las princesas con una esclava al palacio. Casualmente, Katya, la dama de Alejandra estaba en el mercado comprando un par de cosas, y al ver que iban trayendo una esclava al palacio, entró por la parte de atrás. Las dos princesas les pidieron a sus damas que se retiraran al harem, mientras que ellas se dirigieron a la sala del trono en presencia de sus padres
 
Aiko: e aquí frente a usted mi rey y padre mío. La creadora de estas maravillosas confecciones
 
María: *inclinándose ante el rey* mi rey
 
Satoru: por lo que mis hijas me han enseñado de tus hermosas obras de arte confeccionando joyas, es más que claro que tu talento debe ser esparcido entre las poblaciones más exigentes. Por eso, se te está ofreciendo la oportunidad de trabajar como joyera real en este palacio
 
María: eso me comunicaron sus hijas mi señor. La verdad es un gran honor la oportunidad. Aunque me de melancolía y tristeza abandonar mi pueblo
 
Rin: por eso no te preocupes querida. Se te tendrá el privilegio de visitar a los tuyos a la villa, excepto los días en que las jornadas de trabajo exijan más para ti. También podrás ayudarlos con comida. Igualmente la familia es importante. Se te enseñará todo sobre este palacio
 
Satoru: los joyeros también son considerados nobles, ese puesto será para ti
 
María: con tal de cumplir bien mi labor será suficiente mi señor
 
Kumiko: iremos a arreglarte, vestirte para que empieces tu jornada
 
Rin: ya las acompañaré hijas. Pueden retirarse
 
Aiko y Kumiko: si madre *se retiran escoltando a la joven*
 
 Mientras tanto en el harem…
 
Alejandra: una esclava? Aquí en palacio?!
 
Katya: así como lo escuchas amiga. No se que harán con ella, porque no me permitieron acercarme a la sala del trono
 
Alejandra: ahg! Una esclava piojosa. Espero que no pretenda quedarse
 
 En ese momento, vienen Angie y Ran acompañando a la nueva integrante
 
Ran: la reina y las princesas ya vienen para que te podamos arreglar
 
María: que tipo de arreglo?
 
Angie: solo te vamos a peinar, maquillar y a ponerte ropa nueva. Debes estar presentable para tus labores. Y no te preocupes, mi novio es el joyero, te caerá bien
 
María: eso espero
 
Alejandra: *llegando con Katya* me pueden explicar que hace una esclava en el harem?
 
Ran: el rey le dejó trabajar aquí como joyera
 
Katya: pero una esclava mugrosa y piojosa aquí? Que poca del rey
 
María: piojos no tengo, ni estoy sucia. Sucias tienen ustedes las lenguas. Horrendas!
 
Alejandra: como te atreves?! *furiosa*
 
Leonora: *llegando* que sucede hija mía?
 
Alejandra: esta esclava inmunda comenzó a insultarme
 
María: no es cierto! Ella empezó a insultarme primero. Solo me defendí
 
Alejandra: mentirosa!

 
Leonora: a mi hija la respetas inmunda!
 
 En ese momento viene la reina acompañada de sus hijas
 
Rin: algún problema por aquí?
 
Leonora: *mintiendo y haciéndose la buena* no mi señora
 
Rin: ella es María. Nueva joyera en el palacio. Vamos a prepararla para que empiece a trabajar. Ya mandamos a traer el vestido
 
Kumiko: no te preocupes madre. Quedará preciosa
 
María: *nerviosa*
 
 En ese momento se reúnen todas las siervas del harem, unas con un vestido, otras con joyas, peines y maquillajes. Peinarla no fue difícil por lo corto de su cabello. Le pusieron un vestido morado, unos aretes y pulseras dejando el collar que ella misma se hizo, y un maquillaje morado claro
 
Angie: *pasándole un espejo* mira que bella quedaste
 
María: wow! Increíble. De verdad perfecto. Muchas gracias

 
Aiko: vamos al taller. Ya ahí comenzarán tus labores
 
 La fueron guiando al taller. Leonora seguía indignada de la presencia de esa joven, aunque no representara un peligro para la oportunidad de su hija de conquistar al príncipe. Mientras tanto en el taller
 
Sheng: es aquí. Por lo que dice mi novia, tienes muy buena mano y también para los colores
 
María: así es. Con que quiere que comience?
 
Sheng: pues… *trayendo un collar sin piedras y un poco desarmado* este es el collar que es para la hija del sumo sacerdote de Uaset que viene a palacio. Solo falta ajustarlo bien pero… no se que colores le quedarían bien
 
María: *agarrando el collar y mirando las piedras* puedo ver?
 
Sheng: claro
 
María: *examinando las piedras* creo que… una mezcla con piedras de ópalo y estos zafiros que son claros casi transparentes, darían un aspecto de cielo *las ordena para dar ejemplo*
 
Sheng: la verdad si! Buena idea
 
Maria: déjame terminarlo y le sigo ayudando con los encargos
 
Sheng: esta bien. Pero solo llámame Sheng, ahora seremos compañeros
 
María: de acuerdo Sheng *trabajando*
 
 La castaña empezó su trabajo de muy buen humor, todo parecía ir bien. En su hogar por otra parte, Mark iba a la casa de la familia de esta a visitarlos, pero no se imaginó la sorpresa que le esperaba
 
Mark: se fue al palacio?!
 
Marijó: le ofrecieron de trabaja como joyera en el palacio. Se fue hoy que la buscaron las mismísimas princesas
 
Mark: pero por cuanto tiempo será?
 
Jeremy: no lo sabemos. Supongo que la dejaran visitarnos cuando las jornadas de trabajo no sean tan fuertes
 
Jenny: no nos imaginamos que algo así pasaría
 
Mark: (ay que mala suerte 😢)
 
 Por otro lado en la tarde en el palacio casi a la puesta del sol
 
María: que tal? *con el collar terminado*
 
Sheng: precioso! La mezcla de colores es hermosa. A la hija del sumo sacerdote le va a encantar
 
María: gracias. Ahh… cree que podría salir? Ya casi es hora de la cena
 
Sheng: claro. Ve con Angie, en un rato van a la cocina del palacio. Te va a encantar sus manjares
 
María: muchas gracias. Buenas noches *saliendo*
 
Sheng: igualmente
 
 La chica salió en dirección al harem para encontrarse con sus nuevas amigas, aunque aún le confundían los pasillos. Pero de apurada que iba…
 
María: *se tropieza con alguien* auch!!! Disculpa, no te… *mirando fijamente a la persona con quien chocó* Es usted
 
Ouma: nos encontramos de nuevo. Sólo que ahora… *mirándola*
 
María: me veo diferente a como me encontró en la villa?
 
Ouma: si, pero… también te ves muy bonita
 
María: gracia por el cumplido su alteza. Voy a reunirme con las damas de sus hermanas
 
Ouma: oh! No te quito tiempo. Es la segunda puerta el harem
 
María: gracias *se va*
 
Ouma: (si que está muy bonita) *feliz y medio embobado*
 
Alejandra: *mirando a lo lejos* (ninguna esclava mugrosa me quitará a MI príncipe)