Harry Potter y el club de la Esfinge

Capítulo 64

A/N: Hola a todos. No sé por qué, pero parece que han pasado años desde la última vez que publiqué, incluso si solo han pasado dos semanas. Estoy seguro de que es algo sobre hombres enfermos la última vez. Este verano (en la historia) se va a configurar en gran medida. Muchas conversaciones sobre lo que Voldemort está de vuelta realmente significa no solo para el mundo mágico, sino para Harry personalmente. Además... bueno, este capítulo nos da algunas nuevas arrugas agradables para jugar. Te dejaré ir para que puedas disfrutarlo tú mismo. ¡Recuerda revisar!

Mudarse a la casa de Sirius fue ciertamente interesante para Harry. Había sido conducido a una calle en Londres, y le entregó un trozo de papel con las palabras '12 Grimmauld Place' escritas en él, y tan pronto como lo leyó, vio a los dos edificios a ambos lados separarse, revelando un tercer edificio oculto de varios niveles entre ellos.

Cuando Harry entró, no era muy diferente a otros edificios de apartamentos que había visto en Londres antes, un pasillo de entrada ligeramente estrecho que conducía inmediatamente a un conjunto de escaleras. Colgado en la pared junto a la puerta había algún tipo de pintura, pero una sábana negra había sido cubierta sobre ella.

"Harry! Bienvenido a su nuevo hogar, por el momento al menos." Sirius dijo, aplaudiendo a Harry en el hombro, mientras lo guiaba hacia adentro. "Ignora la pintura, es mi madre. Desagradable anciana que es. La intolerancia a la sangre pura correría por sus venas si todavía las tuviera."

"Recuerdo muy bien a la tía Walburga... lo estás minimizando significativamente." Andrómeda dijo, mientras miraba la pintura cubierta.

"Y pensar que sus preciados hijos están muertos o en Azkaban, mientras que tú y yo somos libres y vivimos nuestras mejores vidas." Sirius dijo con una sonrisa arrogante.

"Narcissa está al menos contenta donde está, y sigue la retórica de Walburga, al menos públicamente." Andrómeda dijo, mientras sus ojos miraban el gran mural en la pared.

El mural era un árbol genealógico para los negros, con varios retratos de individuos que se encogían y crecían para proporcionar focos a ciertos. "Aquí Harry, esa es tu bisabuela Dorea, puedes ver dónde agregaron una nota sobre cómo se casó con Charlus Potter. Si esto hubiera continuado más allá de donde se casó con la familia, estarías aquí." Andrómeda dijo, señalando el camino que llevó a Dorea.

"Lo será de todos modos si decido quedarme con la maldita cosa. Estoy desgarrado de si debería o no." Sirius dijo, cruzando los brazos frente a él. "Pondría la conexión entre yo, tú y Dorea por él, y me aseguraría de que Nym también esté en ella."

"Walburga no te quitó?" Preguntó andromeda.

"Ella arruinó mi lugar, pero todavía estoy en el árbol mismo." Sirius dijo, señalando a un lugar arruinado en la pared. "Creo que solo el padre podía eliminar oficialmente a las personas, y a pesar de lo enojada que la madre me acompañó, ÉL nunca me echó de la familia. Todavía no estoy seguro de por qué."

"Crees que tal vez no estaba tan en la agenda de sangre pura como ella?" Preguntó harry.

"El tío Orión todavía estaba en gran parte a favor de la sangre pura, pero definitivamente no estaba tan lejos como la tía Walburga." Andrómeda dijo, sus ojos se lanzaban al lugar en el árbol donde se sentaba el nombre de Walburga.

"Podría haber querido asegurarse de que hubiera un heredero para llevar el nombre negro. Mi hermano mayor Regulus ya estaba con los Mortífagos de Voldemort en ese momento, tal vez solo estaba cubriendo sus apuestas." Sirius reflexionó. "Es difícil de decir realmente, el padre no era exactamente del tipo amoroso o sentimental, pero se enorgullecía de su nombre."

"Independientemente, creo que deberías conservarlo." Harry dijo, mirando la pared. "Es parte de la familia, y cuenta una historia sobre de dónde vino. No es que cada persona en esta pared fuera un supremacista de sangre pura, ¿verdad?"