Harry Potter y el club de la Esfinge

Capítulo 13

¡AN: Perdón por la publicación tardía en este! ¡Este capítulo también fue difícil de escribir, pero por razones totalmente diferentes! Con esto, sin embargo, la mayor parte del año uno está hecho, y solo queda un pseudo-epílogo para el año. Después del próximo capítulo, habrá un poco de pausa mientras tengo todas las bases establecidas para el año 2, descubriendo cómo cambia la historia con el nuevo mundo que he creado. ¡Espero que todos disfruten!

Incluso más difícil que tomar la decisión de vivir con los Tonks por Harry, le estaba diciendo a Susan que no viviría con ella. A Harry le gustaba Susan, ella era una de sus amigas más cercanas, y le hubiera encantado tener la oportunidad de vivir con ella, pero pensó que sería mejor para él vivir con los Tonks.

Susan no lo había tomado bien en absoluto, y se necesitó un montón de tranquilidad gigante para hacerle saber que todavía serían amigos después de esto. Ella finalmente recibió el mensaje.

Harry había continuado su regimiento de entrenamiento, y fiel a su palabra, Lavender, Parvati y Padma habían tomado para unirse a él. Con las bufandas calientes que tenía, y algunas más adquiridas por Flitwick, el cuarteto había corrido a lo largo de las orillas del Lago Negro, lo que Harry también insistió en que su ruta se balanceara cerca de la casa de Hagrid para que pudieran saludar durante las mañanas. Un resultado de eso fue que por las mañanas, cuando se sentía particularmente juguetón, Fang también se uniría a su carrera, y estaba más que feliz de perseguir cualquier palo que Harry o las chicas tiraran por él.

El cuarteto había estado en una de estas carreras a mediados de abril, cuando Hagrid les ofreció adentro para ver algo.

"Qué es Hagrid?" Preguntó Harry, acariciando a Fang en la cabeza.

"Sí cuatro llegan a presenciar cumbre real especial. Mira." Hagrid dijo, señalando con su gran dedo un paquete de mantas cerca de la hoguera en su casa. Dentro de un pequeño nido de mantas había un objeto oblongo, de color negro ónix que reflejaba la cálida luz de fuego. El objeto se movió un poco en el nido, antes de que apareciera una grieta en el costado. Un pequeño conjunto de garras se asomó por el borde, y Harry rápidamente se dio cuenta de lo que era esto. Hagrid había obtenido de alguna manera un huevo de dragón.

La eclosión duró solo un minuto más o menos, cuando el dragón recién nacido salió, y luego se comió rápidamente la cáscara de la que salió, antes de acomodarse en las mantas para una siesta. "Beau'iful no lo es?" Hagrid dijo, limpiándose una lágrima de sus ojos.

"Ooh! Es tan lindo!" La lavanda chilló, sus ojos nunca abandonaron al pequeño draconiano.

"El noruego Ridgeback lo es, lo llamará Norbert." Hagrid dijo, sirviendo a todos un poco de té.

"Hagrid, seguramente te das cuenta de que no puedes mantener un dragón aquí, ¿verdad?" Harry dijo, mirando preocupado alrededor.

"Qué quieres decir con Harry? Mantengo todo tipo de bestias bajo control, desde los Nifflers hasta los Thestrals, incluso el viejo Fluffy." Hagrid dijo.

"Pensé que se llamaba Fang?" Parvati dice, acariciando al perro en la cabeza cuando él la miró por decir su nombre.

"Sí, como Fang, Fluffy es el grande. Más corteza que mordida que es. Poco de música y se va a dormir." Hagrid dijo distraídamente, mirando a través de un libro que tenía. La portada decía "Una Guía Esencial para los Dragones."

Harry archivó ese dato, pudo adivinar quién era Fluffy, y la mirada que Padma le dio desde el otro lado de la mesa dijo que ella también había hecho la conexión. El trío Ravenclaw, es decir, Harry, Hermione y Padma, habían elegido no informar al resto del club sobre la presencia del Cerberus en Hogwarts, incluso Daphne acababan de decir que Malfoy nunca había aparecido para su duelo.