Capítulo 5: Vigilancia y Misterios

49 9 0
                                    

La atmósfera en Beacon Hills High School había cambiado drásticamente desde que Gerald Argent, el abuelo de Allison, se convirtió en el nuevo director. La presencia de Gerald no solo era evidente en su despacho, sino también en cada rincón del instituto. Su vigilancia constante hacía que Allison se sintiera incómoda y constantemente observada, especialmente porque ___ Lynch, bajo las órdenes de Gerald, se había involucrado en todas las actividades posibles de la escuela.

___ se convirtió rápidamente en un miembro activo del equipo de lacrosse, se inscribió en todas las clases que pudo, y debido a su habilidad y dedicación, terminó en clases avanzadas con Lydia Martin. Su objetivo era claro: conocer a la mayor cantidad de estudiantes posible y obtener información que pudiera ser relevante para Gerald y los Argent.

Para ___, Lydia parecía una chica normal, aunque con un toque de trauma y confusión, especialmente considerando los eventos recientes. A pesar de su aparente normalidad, ___ no podía evitar sentir que había algo más bajo la superficie, una preocupación que lo llevaba a cuestionar la verdadera razón por la que Gerald parecía interesado en ella.

En sus interacciones con Lydia, ___ mantenía una actitud profesional, intentando no dejarse llevar por sus propios sentimientos. Lydia era una estudiante brillante y, al parecer, muy querida por sus compañeros. Sin embargo, ___ no podía sacudirse la sensación de que había más en ella de lo que parecía. La presión de su misión de investigar a los estudiantes y el conocimiento de que su familia y los Argent estaban profundamente involucrados en lo sobrenatural hacían que cada detalle contara.

Mientras tanto, Allison estaba abrumada por la presencia constante de su abuelo en la escuela. La sensación de ser vigilada no era nueva para ella, pero con Gerald en el rol de director, su incomodidad se había intensificado. Ella se sentía atrapada entre la preocupación por Scott, que estaba lidiando con sus propias luchas como lobo, y la presión de cumplir con las expectativas de su familia.

Una mañana en la cafetería, Allison se encontró con ___ mientras él estaba sentado en una mesa cerca. Lydia, que acababa de entrar al lugar, se dirigió a su mesa habitual, donde se encontró con Allison.

—¿Cómo va todo? —preguntó Lydia, tomando asiento frente a Allison.

Allison lanzó una mirada hacia ___, quien estaba charlando con algunos compañeros de equipo. Aunque parecía amigable y dispuesto a integrarse, su presencia constante la ponía nerviosa.

—No sé, Lydia. Es raro. Mi abuelo está haciendo que ___ participe en todo, y aunque parece que está aquí para integrarse, no puedo evitar sentir que hay algo más. —Allison frunció el ceño, tratando de entender sus propios sentimientos.

Lydia lo observó con interés, sabiendo que había algo en la dinámica que no comprendía del todo. Ella conocía a ___ como un chico educado y atento, pero la influencia de Gerald la hacía cuestionar sus verdaderas intenciones.

—Quizás solo está tratando de adaptarse, Allison. —Lydia intentó sonar tranquilizadora—. A veces las cosas parecen más complicadas de lo que realmente son.

Pero Allison no estaba convencida. Su preocupación por Scott y la incertidumbre sobre el papel de ___ en la situación la mantenían en alerta. La situación se volvía cada vez más confusa, y el rol de ___ en el instituto solo añadía más misterio a una situación ya complicada.

Esa tarde, en la clase avanzada donde ___ y Lydia se encontraban, ___ observaba a Lydia con atención. Aunque intentaba mantener su enfoque en su misión, no podía evitar sentirse intrigado por la joven que parecía ser un enigma para él.

—Lydia, ¿cómo te va con los estudios? —le preguntó ___ mientras ella hojeaba sus apuntes.

Lydia levantó la vista y le sonrió.

—Todo bien, gracias. —dijo ella con una sonrisa amable—. Aunque a veces me siento un poco abrumada.

___ asintió, intentando mantener una conversación casual.

—Si necesitas ayuda con algo, no dudes en pedírmela. Estoy aquí para eso.

Lydia lo miró con curiosidad, apreciando su ofrecimiento pero sin dejar de sentir que había algo más detrás de su amabilidad.

La interacción entre ___ y Lydia continuó, con ambos manteniendo una fachada de normalidad mientras las tensiones entre ellos y la vigilancia de Gerald continuaban moldeando la dinámica en Beacon Hills.

La verdad sobre lo que estaba ocurriendo en la ciudad y el verdadero propósito detrás de la llegada de los Lynch a Beacon Hills aún estaban por descubrirse, y mientras tanto, cada personaje navegaba a través de sus propias preocupaciones y secretos.

Lydia Martin & You (Short Story Teen Wolf)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora