Adversarios | Sonamy

Capítulo 6

Ingresaron uno a uno por la ventana del apartamento, la zorro con un gran botín en manos, la primera en ingresar en el silencioso lugar, lo primero que hizo fue quitarse la máscara negra de su rostro lo que dejó al descubierto su gran sonrisa al saber todo lo que había obtenido en esa pequeña bolsa.

Después de ella sosteniendola del hombro ingreso el erizo verde, con máscara en mano, aliviado de qué su novia por fin esté alegre sin lanzar comentarios sarcásticos o insultos al azar.

Caminaron hasta el sofá acomodándose en el lanzando carcajadas de felicidad por los articulos recién adquiridos.

Inmediatamente después hizo su ingreso el plateado y el azabache, puesto que tenían que asegurarse que no hayan sido vistos por alguno de los azules.

—¿No ha llegado? —preguntó Scourge al notar que el azulino no se encontraba.

—Me dijo que iba a revisar el perímetro por si las dudas, pensaba que él había sido el primero en llegar —respondió Silver quitándose la máscara de la cabeza.

—Pues ya se está tardando. —Dejó caer una caja repleta de joyas en el suelo de la estancia y se llevó la mano a sus púas negruzcas.

En menos de un minuto, alguien abrió la ventana colérico, el azulado metiéndose en la estancia quitó de su rostro la máscara negra arrojándola lejos.

—Hablando del rey de Roma —río Fiona sosteniendo una brillante tiara sobre su cabeza.

Sonic giró sus ojos sentándose en el otro sillón del costado.

—Deberíamos haber sido más cuidadosos.

—¿Porqué lo dices? —preguntó sentado en el suelo del lugar.

—Alguien, en el local de al frente de la joyería estuvo a nada de disparar. —Hizo una mueca de desagrado al recordar el suceso.

—¿Era un policía? —preguntó serio, inmediatamente después de escucharlo.

—No lo sé, era una chica, pero no logré ver con detenimiento por la oscuridad, si traía una placa o algo así.

—¿Cómo no viste si traía una placa de policía? ¿Acaso no tienes ojos en tu cara? —reprendió en verde cruzándose de brazos, molesto.

—Intenta ver algo con esta cosa tapando tú rostro. —El Plateado lanzó la máscara en la dirección del contrario.

—¿Qué hiciste al respecto? —interrumpió, interesándole más acerca el asunto.

—Evité que diera un tiro y empezó a golpearme cómo una desquiciada. —Empezó a quitarse la negra chaqueta de cuero de los hombros para dejarla sobre su regazo.

—¿Ella hizo eso? —Fiona señaló unas marcas púrpureas que coloreaban en su brazo izquierdo.

Redirigió su vista a los mencionados, incrédulo y frustrado de que haya llegado a algo así.

—Si que es una desquiciada —añadió el verde.

—¿Qué hiciste para que terminarás así, amigo? —preguntó retórico y divertido Silver, aún no podía creer que lo habían golpeado.

—¿Seguro que esa muchacha no te hizo algo más? —Fiona lanzó una risa mucho más fuerte y notoria.

—No, solo me descuidé un poco y no vi bien por la oscuridad, ya lo dije —rechistó molesto a su comentario.

A decir verdad, en el trayecto al departamento sintió un dolor agudo en su brazo, suponía que era por el frío y no por golpes de esa maniática, claramente no iba a admitirlo frente a esos payasos.