Decidí ignorar la llamada telefónica y seguir con mi vida. Me subí al techo de mi consultorio y me sumergí en la contemplación de las estrellas que brillaban en el firmamento como diamantes dispersos en la vastedad del cosmos. Me preguntaba qué era lo que en verdad importaba en este mundo efímero, donde la naturaleza desplegaba su infinita belleza y complejidad.
"¿Cuál es el sentido de la existencia humana en este vasto universo?", me cuestionaba. "¿Somos meros mortales, sujetos a las leyes de la física y la casualidad, o hay algo más profundo y trascendental que nos guía?"
Me sentía perdido en mis pensamientos, pero al mismo tiempo, me sentía conectado con algo más grande que yo mismo. Las estrellas parecían estar ahí, inmutables y constantes, aunque en movimiento, como un recordatorio de que todo en el universo está en constante cambio y evolución.
Me preguntaba si el simple hecho de que yo estuviera ahí en ese momento y lugar era una coincidencia o un trazo más de la línea de la vida que ya estaba planeada. Un vasto cosmo en un universo que se expande para que un día se contraiga y mate todo lo que ya hace en el, pero eso no es motivo suficiente para perder la esperanza.
Mientras reflexionaba, escuché un ruido de alguien subiendo a mi techo y me alarmé. Me quedé escondido, observando quién podría ser el intruso que interrumpía mi momento de reflexión y contemplación.
¿Será un ladrón, un amigo o alguien más?.
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El Anestesista del Alma
Short StoryMi nombre es Sam, soy un doctor , o al menos eso decía mi placa hace 10 meses, cuando por última vez recibí a un paciente. Ahora mi consultorio está vacío, mi botiquín está vacío, mi alma está vacía. Mi casa es un reflejo de mi vida, rota y desorden...
