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—  Yo...

— ¿Tienes hambre, Viren?— volvió a preguntar con voz ronca Darren.— no me mientas.

— ¿Por qué lo preguntas?

— Lila me dijo que estás hambriento.— Darren se apretó más a él.— te vio hambriento, supongo que también te alimentas de nuestra energía y emociones como Darien con sus compañeros.

— no... Estoy tan hambriento, puedo estar muchos días sin comer y..

— tus ojos se volvieron púrpura.— lo interrumpió Darren.— ya no son azules eléctricos, se volvieron muy púrpura. Lila dice que es una reacción del cuerpo de los duendes para indicar la cantidad de hambre que están pasando y que a menudo es grande. Así que dime, Viren ¿Quieres alimentarte de nosotros?

— no...— respondió Viren y Darren se trago el gruñido de disgusto.— Lila está muy débil, además no quiero que tenga malos recuerdos conmigo o una mala experiencia.

—¿Que hay de mí?— preguntó Darren con voz ronca.— puedes alimentarte de mí.

— pero... No quiero que veas y sientas eso, alimentarte de alguien es horrible, prácticamente es robar energía, te sentirás mal y no queiro ser el causante de dos para ti. Yo me suelo alimentar de personas no tan buenas, voy a barrios de se mierda y...

Darren lo agarró de la mandíbula y lo hace girar para que lo mire los ojos, aún así que el lobo se incorporó un poco para mirarlo. Sus ojos verdes amarillentos estaban hechando chispas, su facciones se volvieron serías y Viren se sintió intimidado en cierta forma.

— En tu vida, vuelves alimentarte de otro que no seamos nosotros ¿Quedo claro? Solo puedes alimentarte de nosotros. — Viren iba a decir algo pero Darren le robó un beso.— somos tus compañeros, somos tuyos. Mí cuerpo, mí energía, mí alma, mis sentimientos y mí vida es de ustedes, es por y para ustedes. Cada parte de mí es de ustedes para que hagan lo que quieran de mí, y eso incluye alimentar a mí duendecito.

— me siento injusto, eres de Lila, en todo caso, me siento injusto con ella.— mumruo sonrojado.

— ella quiere alimentarte, ella me dijo que le gustaría que tomarás de ella pero también sé que está muy débil para eso.— Darren sonrió a su compañera dormida y acarició su mejilla, la loba sonrió inconcientemente sin despertarse.— queremos alimentarte, Viren. Somos tuyos.

Viren guardó silencio y miró al gran lobo. Si, se moría de hambre , quería tirarse a él  y devorralo de muchas formas posibles. Los lobos tienen energía fuertes y es difícil dejarlos secos, en el casodne Lila es porque Daleth está desquiciado y seguramente le pedía a otros también que se alimenta de ella. Pero Darren es fuerte y él podría...

Tenía que ser sincero con ellos, tenía que mostrarles tal cual es y todo su ser.

— bien... Un poco ...— murmuró Viren y acaricio la pierna de Lila para luego quitarla despacio y sin molestarla. Entonces Viren se giró y se quedó frente a frente de su compañero. — sentirás como... Bueno, en realidad las sensaciones varían. Algunos sientes como que se les baja la presión, otro le dan ganas de vomitar, otros quedan eufóricos o llenos de adrenalina y en pocos casos...— Viren se sonrojó y Darren sonrió al entender.

— algo me dice  seré el de los pocos casos.

— aún así sentirás un gran vacío cuando te suelte.

— para eso te tengo en mis brazos.— Darren se acercó al rostro de Viren mientras que con su mano debajo de la cabeza del duende le acariciaba la cabellera.— hazlo, nene, cómeme.

Viren sonrió y se acerco un poco más a Darren, tragó saliva nervioso y luego centro su mirada en los ojos del lobo. Busco su energía, la cual estaba camuflada por toda la energía sexual que desprendieron en el cuarto, peor finalmente llegó a ella. Era amarilla, radiante y pura, deliciosa como ninguna otra.

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