Limón y Sal

Un secreto

Jimin estaba tomando el sol y mostrando su vientre, tenía tres meses de embarazo y sentía que su hijo crecía mucho. Su vientre se veía más grande, pensaba que no solo sería su Hyun-Woo posiblemente sería otro más, cuando se hizo el examen solo estaba feliz por estar embarazado, pero por su escape nunca se había hecho un ultrasonido. Se acarició el vientre y luego extendió su mano para tomar el jugo que estaba bebiendo, pero ya no tenía nada. 

─ No puedo creer que deba levantarme... Se siente tan bien aquí. 

─ Toma. ─ dijo Yutaro dándole un jugo, Jimin lo tomó sin ninguna intención, pero observó algo en el fondo que aún no se disolvía. Jimin negó con la cabeza ante la estupidez de aquel chico, quería deshacerse de él solo para que Jeon le tomara como amante, pero  Jungkook ni siquiera dormía con él y desde que había dicho aquellas declaraciones en la cocina no le había hablado. 

Jimin tomó el jugo y se lo lanzó a la cara, Jungkook veía todo desde la ventana de la habitación donde había intentado dormir la última semana. Se molestó ante la reacción de Jimin pues Yutaro le había prometido que le serviría bien, salió de la habitación para poder controlar a Jimin, Taehyung y Hoseok lo vieron salir  y le siguieron.

─ ¿Qué diablos te pasa? Solo te servía...

─ Tú me querías lastimar, vi la pastilla que tenía en el fondo del vaso. Soy policía imbécil. 

─ Yo... Era solo un... ¡Ok! Quiero que te alejes de aquí, el amo Jeon ni siquiera quiere a ese bastardo. 

─ ¿Bastardo?─ dijo Jimin acercándose más a Yutaro, le dio una bofetada que le hizo sangrar los labios, a lo lejos Jungkook observó la escena. ─ Mi hijo no es bastardo, primero lávate la boca antes de mencionar a mi bebé. 

─ Es la verdad, te iba a ayudar a deshacerte de él...

─ Deberías molerlo a golpes. ─ dijo Jin quien se acercaba con la merienda de Jimin, escuchó lo último que habían discutido. ─ Jimin no aceptes nada de lo que te dé, este chico no tiene buenas intenciones contigo. 

Yutaro vio a Jungkook acercarse y cambió su actitud. ─ Yo no hice nada, prometí que le serviría, es muy grosero lanzarme el jugo  a mi rostro, menos golpearme. 

─ ¡Eres un mustio!

─ ¡Contrólate Park! ─ Gritó Jungkook, Jimin le vio con el ceño fruncido y se indignó por su comportamiento. ─ Te sirve y lo tratas como a un esclavo, ¿Es por celos? ¿Crees que me lo follo solo porque no duermo contigo? 

─ Señor Jeon, solo quería que traerle el jugo...

─ Lo sé, vi todo desde la ventana. Jimin, debes disculparte. 

─ ¡Que se disculpen tus bolas! ¿Sabes qué? A mi me vale vergas que te revuelques con este maldito, celos por ti no siento... Si no te gusto menos que me importe, pero aquieta a tu zorra para que no trate de deshacerse de mi hijo, sé que a ti no te importa su vida, pero a mi sí. 

─ ¿De qué hablas? Nada tiene que ver tu hijo con esto. 

─ Él le dio una pastilla a Jimin para abortar a Hyun-Woo, pero Jimin se dio cuenta pues se veía en el fondo del vaso. ─ dijo Jin, Yutaro negó con la cabeza entre llantos, pero Jimin solo vio a Jungkook a los ojos y le dijo. 

─ Dile que no se meta conmigo, que se mantenga a un kilómetro de mi o no respondo. 

─ Espera, ¿Tienes prueba?

─ Ya te dije, no me importa si me crees... Solo mantenlo lejos de mi. ─ Jimin se fue a su habitación, odiaba estar con Jungkook y que este le tratara como si su hijo no fuera importante. Se acostó en la cama y recordó algo que podía haber cambiado las ideas de Jungkook desde que se dio cuenta que no deseaba hijos, pero no quería más discusiones con Jeon. Aquel secreto podía quitarle muchas cosas a Jeon y ya no deseaba ser odiado por alguien más debido a sus investigaciones.