intento de escapar

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Jhon Rizzo la observaba mientras ella se quedaba dormida. Sentarse en aquel sillón y verla era agradable.

Jhon castigó a los hombres que la habían golpeado a Charlotte, al siguiente día este despertó muy temprano, fue a darse una ducha, al regresar a la colonia amaderada, despertó a Charlotte . - Buenos días, te espero en el desayuno.

-Jhon, gracias...

Él la miró asintiendo, su mirada era diferente a la de los primeros días, este salió de la habitación dejando a Charlotte sola, sobre la mesa de luz le dejó unas bolsas.

Charlotte se levantó como pudo, le dolía todo entró al baño, abrió la regadera, se quitó las prendas que cubrían su cuerpo, ella se miró al espejo, tenía moretones por doquier, no había un lugar de su cuerpo pálido que no tuviera marcas.

Sus ojos se llenaron de lágrimas, "Pero tanto daño me hicieron" se decía así misma, entró bajo del agua, se puso el champú, al lavar el cabello se le cayó puñados de su cabello, "tanto cabello me han arrancado" después de darse una larga ducha, lo necesitaba no era solo porque tenía dos días sin bañarse, si no que era terrible el dolor que tenía en todo su cuerpo.

Ella salió del baño envuelta en la toalla y tremendo brinco dio, al ver que Jhon estaba parado observando el jardín, desde el ventanal del balcón, este estaba de espaldas a ella y con mano en sus bolsillos.

Se veía muy guapo sus ojos marrones profundos, cabello castaño y piel ligeramente bronceada, - vístete Charlotte deseo que desayunes conmigo, como tardaste vine a ver como te sientes.

Él seguía de espaldas,¿ podía ser tan amable como un ángel y ser el mismo demonio en persona? Se pregunta Charlotte.

Tenía benevolencia,pero era cruel y frío, sin compasión, aunque Charlotte llegó en mala forma, él sentía como se estremecía al verla.

Jhon se dio media vuelta y quedó sorprendido al verla con una toalla cubriendo su cuerpo, ella estaba enrojecida,- Necesito mi espacio...

La voz de Charlotte sacó del trance a Jhon, este salió de la habitación sin mirar atrás y sonrió levemente, - Tendré que salir de aquí o quedaré loco, tremendo monumento.- susurró Jhon bajando las escaleras.

Charlotte se puso un vestido rojo escote corazón, con unas zapatillas doradas,ella estaba sorprendida, cómo es que este hombre hasta su talla sabía,ella se maquilló sutilmente y salió de la habitación, caminó por el largo pasillo, bajó las escaleras, una mujer pelinegra estaba parada al pie de la escalera.

Esta mujer hizo reverencia con la cabeza, - él señor la espera en el comedor, señora Charlotte...- la mujer la guió hasta donde se encontraba Jhon, este trago saliva y se puso en pié, se acercó a Charlotte tomó la mano y llevó a sus labios.

- Estas preciosas...

Charlotte lo miro entreabriendo sus labios, -Gracias Jhon...

Este apartó la silla para que ella se sentara, así era cada noche,mañana y mediodía, esto se volvió un hábito en pocos días. Jhon sonreía al verla dormir, se sentaba a su lado y corría el cabello del rostro de ella.

Charlotte al 4to día intentó escapar, salió por el balcón con sábanas y después comenzó a correr, el lugar estaba rodeado de bosques, ella corría descalza, le dolía sus pies, pero no le quedaba más remedio que correr.

Uno de los hombres del sistema de seguridad, vio en las cámaras como Charlotte corría - Señor Jhon, la mujer escapó - Jhon dio un golpe en la mesa.

Charlotte

Salí corriendo de ese lugar,me dolían mis pies,pero debía irme, esta era mi única oportunidad,escuchaba como unos pasos venían detrás mío -¡Aush! -Grité al sentir que me agarraban del cabello,forcejee pero no lograba soltarme del agarre, sentí como me estaba ahogando, sentía que se me nublaba la vista.

Sentidos del almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora