Fire in my Heart [Changlix]

XIX

Toda la historia será narrada por la escritora.

Desde temprano Felix despertó alado del bombero que se estaba arreglando a su lado. "Buenos días", saludó al pecoso que se estaba vistiendo.

"Buenos días", aceptó el beso en sus labios con un sonrojo. "Ya es tarde, ¿No vas al trabajo hoy?", ChangBin negó poniéndose el cinturón.

"¿Crees que iba a dejarte ir al evento de San Valentín, solo? Mientras mamá se ocupa de todo y te deja solo", sonrió y negó. "Claro que no", dijo orgulloso. "Más que eso, voy a ayudar con todo el mobiliario"

"Celoso", regañó con un pico en los labios. Hoy vestía unos pantalones de vestir cómodos y holgados, una simple polera blanca y encima un chaleco rojo de corazones guindos en 3D. ChangBin vestía unos pantalones de vestir con una polera negra y una chaqueta de cuero con un corazón en la espalda. "Tengo un regalo para ti", ChangBin le miró, se encontraba sentado en la esquina de la cama.

"¿Hm? ¿Qué es?", se interesó y luego vio a Felix acercarse a él.

"Algo especial... Si lo recuerdas", entregó una cajita al mayor, ChangBin la abrió y encontró la pulsera de plata que ambos compartían de niños.

"¿Cómo la encontraste?", sus ojos brillaron mientras la sacaba e intentaba ponérsela.

"Nunca se perdió, es que yo la enterré en el patio de mis padres antes de irme", le ayudó a ponerla. "Cuando estaba cortando césped la encontré", sonrió.

"Yo tengo la tuya..." se levantó y fue por ella. "Le hice unos ajustes, ¿Quedó linda?", Felix asintió ya que colgaban dijes de flores pequeñas.

"Si, me encanta", se la colocó sin problema y la lució emocionado de volver a tenerla. "Gracias", lo abrazó.

"¿Listo? Muero de hambre ¿Tú no?", salió primero y Felix le siguió sin poner pero a pesar de que él supiera cocinar, su sorpresa fue en grande cuando encontró una mesa de desayuno adorable con un bello florero al centro, daba paz el ambiente.

"¿Qué es todo esto?", le vio con una sonrisa.

"Es San Valentín, debería ponerme romántico ¿No?", Felix se sentó frente a él y entre charlas comenzaron a comer. 

"Te volviste mucho más romántico, ¿Dónde lo aprendiste?", felicitó.

"De mi padre", sonrió orgulloso. "Estoy seguro de que si te viera de nuevo se pondría muy feliz y orgulloso de dónde has llegado tú solo", Felix se sonrojó.

"Te amo", la palabra endulzó el oído de quien escuchó y por su parte le guiñó, continuaron recordando anécdotas de pequeños, cada vez soltaban más datos del padre del bombero.

Al terminar recogieron todos los platos y limpiaron la casa, eran las 12:00 cuando se encontraban de camino al cobertizo que era un lugar enorme, especial para todo el pueblo. El evento de San Valentín era para todos, desde niños hasta adultos mayores, era un gran convivio para pasar el rato bailando con música en vivo, comida y regalos.

Pero para que todo diera una aura romántica ChangBin y Felix tenían que arreglar el enorme lugar al aire libre. "¿Sabes?", se acercó el mayor con una banderilla de bombones en forma de corazón que venía comiendo, había holgazaneado un poco con EunSeop.

"¿Hm?", Felix le prestó atención.

"Te ves adorable concentrado, vine desde allá sin quitarte la mirada de encima", Felix se sonrojó y le sonrió. "¿También sabes arreglar en fiestas?", indagó.

"ChangBin, ya es tarde para que intentes sacarme charla", regañó robando un bombón. "Corta esta guirnalda en partes iguales a esta, voy por la escalera", dijo. "Necesito llegar arriba", ChangBin asintió dejando la banderilla de lado, metió la cabeza entre las dos piernas del menor y lo acomodó en sus hombros sin problema. "¿Qué?... ¿Qué estás haciendo?", se asustó por la altura.