¿Cómo es que personas de mundos tan distantes se vieron envueltas en la guerra personal de un Dios?
Los diferentes capítulos de esta historia muestran el camino y los motivos de aquellos que acompañarán a Sirius en su lucha.
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Ciudad de México, la Tierra, año 1990 de la era moderna
Hoy presentamos: ¡Superburbuja se enfrenta a Mugre Mugrón!
Alrededor de las 6 de la mañana de un sábado un niño de diez años veía la televisión. Recostado boca abajo en el tapete rojo de la sala de estar y soportando la cabeza con las manos, observaba fijamente la pantalla curva de colores chillantes.
Superburbuja (Superbubble's Adventures en el original estadounidense) era uno de sus programas favoritos. Opinaba que era el "escalón" perfecto para ver Escugato (盾の猫騎士シールド/Tate no nekokishi - SHIIRUDO en el original japonés), a quien uno de sus maestros llamaba "Excugato", aunque eso a él no le importaba, tanto.
Después de este venían Los Guerreros Planetarios (天使戦士栄司/アンジェリックウォリアーエイジ / Angelic Warrior Eiji en japonés), que era su "máxima caricatura preferida" del momento.
Normalmente este horario de la mañana era sagrado para él, ponía toda su concentración. Sin embargo, hoy, pese a que sus ojos estaban dirigidos a la tele, su mente estaba orientada hacia adentro, a un tren de pensamiento en concreto: los problemas de su amigo Ricardo.
Según contaba tenía una vida complicada, varios miembros de su familia eran muy estrictos con él. No lo dejaban ver casi la televisión; lo obligaban a entregar las cosas siempre con la mano derecha y a comerse toda la comida por muy horrible que fuera; incluso tenía prohibido escuchar rock.
Además, el chico también era pobre: vestía en apariencia formal pero siempre llevaba las mismas prendas, por eso tanto su ropa como zapatos ya estaban muy gastados. Parecía un niño contento, pero al conocerlo mejor se podía saber que no lo era.
Después de que Dirty Dirt / Mugre Mugrón, utilizara el poder del smog para dejar a Superburbuja desvalido temporalmente, hubo un corte a comerciales. Ramiro, o Ram, como prefería que le llamaran, se levantó rápido a buscar el dibujo de Sirius Jinnx.
Se lo había dado Ricardo una semana atrás. Era una copia del original. Siendo honestos, los dibujos de Ricardo no eran buenos, y su letra era todavía peor, pero la idea le había parecido genial. Se trataba de un superhéroe que viajaba por las galaxias salvándolas de cuantos problemas tuvieran, utilizando una multitud de habilidades que había ganado con mucho esfuerzo a través de sus viajes. Este adolescente en apariencia, vestido con ropas azules y joyas doradas (no eran de oro, según había dicho Ricardo, sino de un material de otro mundo) sonaba muy poderoso.
Ricardo lo había convencido de que Sirius era más fuerte que Superburbuja, Escugato y otros paladines; aunque... eso de que también fuera más fuerte que Eiji, incluso llevando su vestidura de Ángel, habría que verlo...
Lo encontró en su caja de las cosas importantes. No dudó. Apretó el dibujo suavemente contra su pecho y cerrando los ojos, susurró:
