Lobo triste.

6-Alexandra Alhuim Hail

Me abrazo al cuerpo sin vida de Clark. Lloro, mis lágrimas manchan las mantas de la cama.

Unos suaves toques en la puerta me indican que Petra quiere entrar. Seguramente el rey le haya contado todo.

-¡No entres!-Grito.

Pero petra no me hace caso y entra en la habitación. Me separa del cuerpo de Clark y me lleva al vestidor. Me pasa ropa interior, nada de corsés, y unas mallas y una camisa negra. La camisa me queda holgada pero las mallas me quedas apretadas a los muslos. Coge mi pelo, que un mes había crecido bastante, y me lo empieza a trenzar. La trenza me llega a la altura de los hombros.

Me desperezo de Petra y me dirijo al montón de ropa que perecía a Clark. Recojo su espada, que descuido del rey haberla dejado ahí. La desenvaino y Petra se queda petrificada.

-No te hare daño.-Le digo- Solo necesito un cambio.

Me pongo frente al espejo y deshago la trenza que hizo Petra, necesito olvidarme de Clark y de los días que pase sin intentar asesinar al rey. Paso la hoja de la espada por mis dedos. La levanto en alto, Petra se agacha temiéndome, pero no es a ella a la que quiero cortar. Agarro con fuerza mi pelo tocando la cabeza y corto. Ahora mi pelo es tan corto como el de un hombre, salvo por la parte de adelante que quedaron unos mechones un tanto largos adornando mi cara.

-Señora. Por qué ha hecho eso. Pensaba que le gustaba su nuevo...-Vuelvo a levantar la espada.

-No me llames señora. –Digo mirándole a los ojos. – Mi nombre es Alexandra Alhuim Hail y soy una asesina.

Petra se lleva las manos a la boca, como si no los supiera, y se encoge hasta parecer más pequeña de lo que es.

-Seño...Alex. ¿Qué va a hacer?

-Todavía nada. Necesito que el rey me saque de aquí, después.....bueno no habrá Rey.