La Inút*l Número Uno Del Reino Celestial [GL]

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(Portada Original)

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Capítulo 1:

Era el año 1326 del Abismo Celestial, en el tercer mes.

Ming Jiansu, el Señor de la Montaña Ah(Dong'e) del Este y uno de los cuatro grandes generales de la Corte Celestial, había desaparecido en el campo de batalla entre Celestiales y Demonios.

Hace más de mil años, tras la primera Gran Guerra entre Celestiales y Demonios, el Reino Celestial y el Abismo Demoníaco habían firmado el "Pacto del Fénix Caído". Desde entonces, había habido una paz relativa, y sólo habían surgido conflictos menores. El campo de batalla, vestigio de la guerra pasada, se convirtió en tierra de nadie y en un lugar donde los dos reinos resolvían sus disputas.

A principios de año, como era costumbre, el Señor de la Montaña Dong'e, Ming Jiansu, fue a patrullar el campo de batalla. Sin embargo, desapareció sin dejar rastro. El funcionario celestial que la acompañaba había regresado al Reino Celestial hacía tiempo, pero no había rastro de ella desde hacía tres meses. El Emperador Celestial había enviado gente a buscarla varias veces, pero fue en vano. Aunque nadie sabía lo que había pasado, una cosa era cierta: Ming Jiansu, el Señor de la Montaña Dong'e, había perecido.

La Corte Celestial tenía cuatro grandes generales. Con el puesto de Dong'e vacante, aún quedaban tres Maestros Espada: Río Oeste (Xi He), Salida Sur (Nan Li), y Estrella del Norte (Bei Chen). El Emperador Celestial(Tian Di), sin mucha preocupación, empezó a seleccionar lentamente un nuevo Señor de la Montaña Dong'e, sin tomarse a pecho la muerte de Ming Jiansu. Sin embargo, los otros oficiales Celestiales estaban fijos en la Montaña Dong'e, ansiosos por ver cómo se desarrollaba el drama. Por supuesto, no estaban observando a Ming Jiansu, sino al otro "señor" menos legítimo de la Montaña Dong'e, Feng Chiyue, y esperando su caída.

Había dos figuras muy desagradables en el Reino Celestial. Una era la arrogante y dominante Emperatriz Celestial, Chu Yi. La otra era la indolente, problemática, pero hermosa Feng Chiyue. Pero si tuvieran que elegir a la que más les disgustaba, sin duda sería Feng Chiyue. ¿La razón? La emperatriz Chu Yi era una luchadora formidable. Se decía que el Abismo Demoníaco adoraba la fuerza, pero el Reino Celestial no era una excepción. Por supuesto, había otra razón tácita: ¡los celos! No podían entender por qué Ming Jiansu favorecía a Feng Chiyue. ¿Era sólo por su impresionante belleza? Imposible. El Señor de la Montaña Dong'e, Ming Jiansu, no podía ser tan superficial. Feng Chiyue debía de haber utilizado algún truco turbio para embrujarla.

Pero ahora, toda esa charla no tenía sentido. El único y mayor apoyo de Feng Chiyue había desaparecido. ¿Podría continuar con su arrogancia? Probablemente pronto sería expulsada de la Montaña Dong'e, ¿no es así? Ante este pensamiento, muchos oficiales Celestiales mostraron sonrisas de suficiencia, intercambiando miradas cómplices con sus colegas mientras caminaban. Si Feng Chiyue se quedara realmente sin un lugar adonde ir, podrían incluso ofrecerle generosamente cobijo.