(XLVI) Análisis de sangre

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Como había prometido, Beomgyu entregó un frasco de la sangre de Taehyun a Minho, Hyunjin también había conseguido una muestra de Jeongin, así que todo estaba listo. 

― ¿Cómo la conseguiste? 

― Bueno... puede que haya usado hipnosis en él, curé la herida, pero me preocupa. 

― Bueno, no te preocupes mucho, podrás asegurarte de que esté bien, quedaste en acompañarlo a su casa y ahora mismo deberíamos estar yendo hacia tu club. 

― Cierto, guarda la muestra bien, me esforcé mucho para conseguir esa. 

― Seguro. 

Ambos chicos corrían por los pasillos del colegio, recordando los tiempos en los que ellos mismos tenían que correr para no llegar tarde a clases, ahora corrían para no llegar tarde a dar una clase. 

― Chicos. 

― Dos minutos tarde, que vergüenza. 

― Cállate ―Hyunjin estaba a nada de empezar una pequeña discusión con Yeonjun, pero la mirada de su amigo lo detuvo―. Cierto, como hoy es su día de descanso, me tomé la libertad de traerles a alguien para que se motiven, también aprovechando que el profe no estaría hoy. 

― ¿Un invitado? 

― Ajá, un invitado, pasa querido invitado ―Minho entró al aula luciendo más intimidante de lo que lucía el año pasado cuando aún estaba en el colegio. 

― Hola ―solo ese saludo alborotó a todo el salón, los estudiantes ahogaron gritos de asombro, Minho era el mejor bailarín de su escuela, estaba en dos clubes y estudiaba danza, era lo mejor de lo mejor, todos ahí querían ser como él o ser sus amigos, pero él simplemente estaba en otra liga―.  Uhm, no teníamos tantos días de descanso cuando yo empecé, pero está bien, se merecen descansar, así no se sobrecargar y reprueban matemáticas, como alguien ―y esa mirada cayó en su hermano. 

― No reprobé, casi, pero no. 

― En fin, escuché que estaban practicando una nueva coreografía ¿Pueden mostrarme? ―los chicos seguían quietos en el suelo, nadie se animaba a levantarse y mostrar la coreografía―. Bien, eso no fue una petición, fue una orden, de pie. 

Minho estaba en control de la clase, estaba en su elemento y lo que se supone sería un día de descanso se convirtió en una clase especial dada por uno de los mejores de su tiempo. 

― Bien, espero que con esos consejos mejoren la coreografía, trabajen más en su coordinación, pero no quiero que en el escenario estén viéndose entre ustedes, solo escuchen los pasos de su compañero de al lado, no lo miren y guíense con la música, pero no dependan de ella al cien. 

― ¿Vendrá a ver? 

― Claro, mi hermanito sigue aquí y no me perdería algo dirigido por mi mejor amigo. 

― Cierto, tú eres su hermano. 

― No parece, yo lo sé. 

― Bueno, no me decepcionen. 

― ¿Puede hacer la coreografía usted? 

― Sí, solo una vez. 

― Por favor. 

― Bueno, si insisten. 

Hyunjin y Yeonjun rodaron los ojos sabiendo que Minho lo hacía con gusto, ama alardear de lo genial que es. 

― ¡Wow! 

― Sí, wow, esa es la fuerza que le tienen que poner al baile ¿Me entendieron? Delicadeza y fuerza, todo en uno, pero no al mismo tiempo, es como un cuchillo, un movimiento suave hace un corte limpio, un movimiento fuerte hace un gran impacto, así deben verlo, fluir cuando tengan que fluir y golpear cuando tengan que golpear ¿Entendieron? 

RAIN SOUL | soojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora