¡¡Fuiste Tú!! (Gran Final)

120 19 26
                                    

—— queridos hermanos, nos hemos reunido aquí para...

—— ¡¡Objeción!! —— la puerta fue abierta, entrando en esta, los caballeros faltantes, que no dudaron en gritar al mismo tiempo. Interrumpiendo, por ende, al Dios del Rayo.

—— ¡¡aayy, no puede ser!! —— protestó zeus.

—— ¡Ikki, Shiryu! —— nombró emocionado Seiya.

—— Shiryu. —— le siguió Dohko.

—— ikki. —— Merida y Hyoga.

—— Shiryu. —— Saori.

—— ikki. —— Aioria.

—— kiki~ —— incluso Shun.

—— ¡¡SHIR-KKI~~!! —— completaron los espectros en coro, parándose de sus asientos de nuevo y juntando ambos nombres para llevar ritmo. 

—— ¡esta boda es un fraude y yo vengo a evitarla! —— gritaron ambos de nuevo, a lo que se voltearon a ver con furia.

—— ¡Shiryu, Ikki! ¡¿Qué están haciendo?! —— Seiya quería bajar hacia ellos, pero la mano grande y fría de Hades lo había detenido, acto que no fue ignorada por Fénix y Dragón.

—— ¡me porto como un hombre! —— gritó esta vez shiryu. —— ¡Seiya, yo...! —— mas sus palabras quedaron cortas. Ikki lo había tomado del cuello de su camisa china, por detrás, para luego aventarlo fuera de la vista de Pegaso. El pobre dragón veía estrellas por la aventada inesperada, había impactado en las bancas donde se encontraban los Espectros de Hades. —— se suponía que eso no estaba en el guión.

—— me vale un comino tu estúpido Guión. —— jadeos de indignación se escucharon de parte de los Espectros, trataban de quitar al pobre dragón de uno de los Dioses Gemelos. Sin importarle siquiera, Ikki se plantó firme, titubeó, pero aún así habló. —— Seiya... ¡Seiya, yo te amo!

La sala se llenó de jadeos de sorpresa, no por las palabras (eso no era un secreto), sino porque el Gran, poderoso, vigoroso, friolento y serio Ikki de fénix... Estaba con las mejillas bien rojas y su cuerpo temblaba de la vergüenza.

Todo ese silencio fue cortado al momento en que la puerta se abrió bruscamente. —— ¡¿Qué rayos acabas de decir?!

Más jadeos de sorpresa se hicieron escuchar, de la puerta había ingresado uno de los tres jueces del Inframundo. Todos volteaban a ver a ikki y luego al otro, en busca de una respuesta.

—— ¡¿Tú qué?! —— gritó ikki igual de sorprendido. —— ¡que yo recuerde no tuve nada contigo, Radamantis!

—— ¡¿insinúas que se terminó?! —— cuestionó el rubio con indignación, su mano tocaba su pecho y veía inseguro a ikki y los presentes en la capilla.

—— ¡¿Terminar?! ¡Ni siquiera empezó!

—— ¡¿ves de lo que te hablo, Seiya?! —— señaló Hades. —— ¡el pollo está con uno de mís jueces y la lagartija esta a punto de morirse! ¡Debes quedarte conmigo!

—— ¡un momento! Aquí hay algo que no me cuadra! —— todas las miradas se posaron en aquel chico que tenia la mano alzada, estába en una de las últimas filas. —— en primera, y muy importante, ¿qué es lo que pasa? ¿Qué tenemos que ver nosotros estando aquí? Y, por último, ¿no se supone que este idiota estaba cortejando a mí hermano? ¿Por qué ahora anda detrás de Fénix?

—— Aghh, ¿y así quieres convertirte en Patriarca cuándo ni captas las cosas a la primera? —— comentó el español capricornio.

—— ¡te lo resumo! El cara pálida, la gallina y la lagartija quieren con el burrito. Pero éste burrito quiere también con los tres.

¡Cuidarlo fue TU idea! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora