1 0 M I N U T O S

2. L A T O R R E

—Esto... Perdona, pero... ¿Dónde estamos?

—¿Eh? ¿Te has perdido? Estás en FWOB.0379, menudas tonterías preguntas, hijo, ¡ja, ja, ja!

Menuda cara de tonto se me quedó cuando escuché la respuesta del humilde señor a mi pregunta. Me encontraba en la calle justo debajo del edificio en el que aparecí tras usar el misterioso teletransportador, a la cual había llegado haciendo uso de un ascensor, y había preguntado a la primera persona con la que me crucé una vez que puse los pies en la firme acera. Eran las 11:12.

—A-Ah... Claro. —Contesté, por contestar algo. — Perdona, es que he tenido algún problemilla y me he desorientado. Estamos en Estados Unidos, ¿verdad...?

El señor se asombró por mis palabras incluso más que yo por las suyas. No nos estábamos entendiendo en absoluto.

—¿Estados... Unidos...? Oye, no había escuchado ese nombre en mi vida, pero quizá en la agencia de turismo te pueden ayudar... Está en el norte, siguiendo toda esta calle, y después a la derecha en el cruce de la panadería. Tardarías unos 20 minutos en llegar, aunque puedes pagar un taxi en la plaza que hay más allá, dos ca-...

—¡Gracias por la información! ¡Muy amable, hasta luego...! (Mierda, como se enrolla el tío, he perdido muchos segundos... Además, como si tuviera yo tanto tiempo como para ir hasta esa oficina, no tengo dinero...)

Algo enfadado, me fui de allí, a paso ligero, mirando el reloj en mi muñeca.

11:13

—¡¡AGHHH!! ¡Se me acaba el tiempo...!! —Pensé para mis adentros, cada vez más nervioso. Pero los nervios aumentaron todavía más cuando me fijé en el mapa del dispositivo... El monstruo estaba muy cerca, iba a llegar hasta mí mucho antes de que el reloj marcara las 11:20.

—¡¿E-Es en serio?! ¡Pensaba que el monstruo llegaría aquí justo antes de poder escapar, como antes! —Reflexionaba, frustrado.

Volví a echar a correr, desesperado, llamando la atención de la gente de la calle.

—¡¿Q-Qué miráis?! —Pregunté a la muchedumbre, que me miraba con ojos de extrañeza, como si fuera un loco. —¡¡Estáis todos muertos, salid de aquí ya!! ¡¡Huid a un lugar seguro!!

"Huid a un lugar seguro". Mientras corría, aquellas palabras resonaban en mi cabeza. ¿Hacia dónde estaba huyendo? ¿Cuál era un lugar seguro?

Mientras trataba de encontrar una respuesta a tal incógnita, me quedé admirando por un breve momento las elevadas estructuras de aquella urbanización. De entre todos los rascacielos, había varios que destacaban por ser especialmente altos y anchos. Uno de ellos se encontraba relativamente cerca de mí, y la inspiración me llegó al momento.

—Tengo que llegar hasta allí... —Pensé, tratando de convencerme. Si trataba de huir en una zona plana de él, estaría acabado, pues la velocidad de ese ser es más alta que la de un coche... Pero si lo hacía escalar, quizá la cosa sería diferente.

11:14

Después de correr un poco más, paré en seco. Me agaché, apoyándome sobre mis rodillas, mientras mi respiración se volvía más y más fatigada. Llevaba ya un tiempo ignorando un "pequeño problema" al que no le había estado prestando la suficiente atención hasta ahora...

—Agh... Arf... Me muero de sed... —Me lamentaba para mis adentros. —Agh... He estado corriendo demasiado, y además yo tampoco es que sea un atleta... Arf... Necesito beber algo, o no podré correr más...