Desesperado por "amor"

25 9 0
                                    

Marcus estaba decidido y decidió pedirle una cita formalmente a Rossie, en su lugar favorito de la escuela: La gran biblioteca.
Llegó el "frabulloso día" y Marcus estaba más que impaciente. Llegó mucho antes oara prepararse ya que pensaba declararse a Rossie ese mismo día.
Después de tanto esperar por fin ella llegó, estaba tan hermosa y delicada cómo siempre, con un estilo sútil que la hacía diferente al resto, y eran parte de las cosas que a él le encantaban de Rossie.
Se saludaron con un abrazo y fué el primero que se han dado.
Rossie estaba encantada por su cita, era su lugar favorito y claro que estaba más que feliz.
Siguieron paseando y Marcus no apartaba su mirada de ella, estaba tan cegado con su belleza que ni le prestaba atención a sus palabras. Después lo llevó a una parte en la que sólo podían ingresar estudiantes de una extraña Aristocracia. Era un lugar particularmente lujoso y no había nadie, así que Marcus pensó que era el momento.
Él fué hacia ella, la tomó de una de sus manos y le puso su regalo en ella.
-Esto es para ti. Lo preparé con amor, supongo.- dijo Marcus mientras Rossie habría la pequeña caja.
-Ooww, es taan lindo, ¿cómo sabías que me gustan las pasticetas?.- dijo muy emocionada Rossie mientras se las comía con rapidez y enseguida se lanzó hacia Marcus para abrazarlo.
-¿Enserio te gustaron?, no soy tan bueno cocinando... Y Rossie tu hueles tan... bien.- dijo Marcus devolviendo el abrazo a Rossie y hundiéndose en ella. Ese abrazo tardó demasiado, pero Marcus sabía muy bien el significado de eso... El hechizo hizo efecto y ya era el momento de dar el gran paso que había planeado desde hace mucho y él estaba decidido, preparado, pero algo que sobrepasaba eso era que él estaba tan desesperado.

Marcus separó a Rossie de él y la tomó de ambas manos y las acarició y le dijo:
-Mi querida Rossie, desde que te conocí me he enamorado de ti y te he amado tanto. Espero y tú sientas un amor tan intenso cómo el mío hacia ti. Por eso quisieras... ¿Intentarlo conmigo?, puedes darme una oportunidad. Quiero que tú seas mi novia.- dijo Marcus a Rossie, muy agitado y ella estaba en shock.
Ella se quedó en silencioso un tiempo mientras preparaba su respuesta y Marcus la esperaba atento.
-Marcus yo... También te amo... Tú me gustas y me gustaría estar contigo, sólo prométeme que no es mentira y que tú si me amas... No quiero que me mientas.- respondió Rossie angustiada. A Marcus no le interesó todo eso, sólo le importaba que Rossie al fin era suya, y el estaba tan... Eufórico.
-No te miento mi Rossie, nunca te dejaré ir... Créeme que nunca.- aclaró Marcus volviendo a aferrarse al cuerpo de Rossie que era muy pequeño a su lado.
Luego de un largo rato anocheció y aunque era era un puente vacacional, Rossie debía irse, tenía muchos compromisos y obviamente ella le aclaró que era una persona ocupada cosa que Marcus aceptó, en ese momento.
Marcus la dejó en su dormitorio y la despidió con un beso, y era el primero que ellos dos se han dado. Y Rossie tan cegada e ilusionada se echó a dormir.

Marcus estaba eufórico y sabía que por fin lo había logrado, pero... Las palabras de Rossie lo atormentaban: "prométeme que no es mentira y que tú si me amas", el se preguntaba eso, si sólo era un capricho o era amor, sin embargo, su desesperación lo cegaba y él aún no estaba satisfecho...
Marcus de acercó al gran mural de fotos de Rossie que tenían en la pared. Mientras reía de una forma enferma de repetía: "Por fin eres mía mi hermosa Rossie, por fin lo eres y no serás de nadie más"

Justo esa noche Rossie recibió una buena noticia: Su amiga de la infancia sería trasladada a su Instituto y la vería después de años. Eso la hizo aún más feliz y pensó: "Creo que por fin me está pasando algo bueno en esta terrible vida, ¿cómo podría pasar algo malo, cómo sería un error?".
Ohh Rossie, hermosa Rossie... Tú no tienes idea.

El flagelo de las orquídeasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora