Encontrarnos este verano // Glasshearts

𝓥𝓲𝓮𝓳𝓸𝓼 𝓪𝓶𝓲𝓰𝓸𝓼

El primer día del campamento oficialmente había llegado, Chloe se levantó temprano a arreglarse para ir a desayunar al comedor. Una vez ya estaba bien cambiada se encargó a despertar a Red, quien tenía el sueño muy pesado, la alarma no había sido suficiente para que regresara de el reino de los sueños.

—Reed, ya hay que levantarnos, tenemos que ir a despertar a los niños, alistar a los más pequeños y llevarlos a desayunar, vamos!— Chloe susurraba para no asustar a la pelirroja, sacudiéndola levemente por encima de la cobija que la cubría de el frío de la noche.

—Mmm, ya voooy~— Se lograba oír a una Red malhumorada por tener que dejar aquella cama tan deliciosa al tacto, aún que el sonido de la voz de Chloe la hizo tranquilizarse, sin duda era una voz angelical a su punto de vista.

Así la pelirroja se levantó y empezó a alistarse para empezar el día. Ambas chicas tenían una camiseta la cual era obligatoria que usaran todos los días, esta era del color de su cabaña, en su caso un marrón claro, su uniforme indicaba que eran guías, este tenía sus nombres bordados para facilitarle a los niños aprenderlos.

Red amarró su pelo en una coleta alta para que no le estorbara al momento de hacer actividades el resto del día , mientras observaba como Chloe se realizaba dos trenzas. Una vez terminaron de arreglarse salieron juntas hacia las cabañas de los pequeños, a diferencia del día anterior ahora Chloe fue con los niños y Red con las niñas.

Red ciertamente era quien de las dos tardaría un poco más ya que muchas de las pequeñas no sabían peinarse aún, por lo que necesitaban ayuda para desenredar o atar su pelo. Justo ahora está se encontraba ayudando a una pequeña de cabellos azulados oscuros y unos hermosos ojos color esmeralda, quien le había pedido de favor que le hiciera dos colitas altas.

—Muchas gracias señorita Red!—Exclamaba la pequeña con una linda sonrisa mientras su guía hacía una división en su pelo para poder realizarle el peinado.

—No hay de qué— Contestó con una honesta sonrisa de su parte, nunca se había imaginado que eso era parte de ser guía de una campamento. Red solo había peinado a sus muñecas y a sus amigas cuando eran pequeñas, mucho tiempo ya había pasado de eso, pero ahora que lo hacía nuevamente era algo lindo, hasta relajante "Quiero tener una niña algún día" pensó para sí misma.

—Chicas!, porfavor alístense rápido ya que tenemos que ir a desayunar en un momento— Exclamó la guía, al escuchar palabras de afirmación por parte de las otras campistas sigo con tranquilidad peinando a la pequeña.

En eso otra pequeñita castaña de lindos ojos rasgados se acercó a la niña de ojos esmeralda y se sentó en una de las camas, dispuesta a esperar a que terminaran de peinar a su amiga.

—Señorita Red— habló la pequeña de ojos esmeralda —¿Que vamos a hacer todo el verano?—.

Pensó mientras terminaba de atar una de las coletas de niña—Bueno, cuando yo estuve aquí la primera semana jugamos muchos juegos en grupo y hacíamos muchas actividades divertidas, ya después de la eso empiezan la competencia de las cabañas— Contestó, generando curiosidad y emoción en las niñas.

—Una competencia??— Preguntó con emoción la pequeña que se encontraba sentada en la cama.

—Así es, verán, haremos muchas competencias, como deportivas, de manualidades, destreza física, y concursos divertidos también.— hizo una pausa para tomar una liga para terminar el peinado. —Y les diré algo— bajó un poco su voz en un intento de hacerse ver misteriosa. —La cabaña con más puntos ganará un graaan premio cuando el verano termine—.