ENTRE CHISPAS Y CORAZONES. | ITADORI X NOBARA

06 | La competencia y lo que no dicen las palabras.

El día de la competencia finalmente llegó. El ambiente en la escuela estaba cargado de emoción y nerviosismo, con estudiantes y profesores corriendo de un lado a otro, ajustando los últimos detalles y asegurándose de que todo estuviera en su lugar. Los pasillos se llenaban con ecos de charlas aceleradas y el sonido de tacones y zapatos resonando contra el suelo.

Yuji y Nobara llegaron temprano al auditorio, ambos con una energía que era una mezcla de concentración y tensión. Habían pasado días practicando hasta el cansancio, pero había algo más que los mantenía en vilo. Aunque no lo habían vuelto a mencionar, ambos sabían que la conversación interrumpida de la noche anterior seguía flotando en el aire, sin resolverse.

-Bueno, aquí vamos -dijo Yuji mientras ajustaba su corbata. A pesar de su habitual actitud relajada, era evidente que también estaba nervioso.

-Sí, será mejor que no metas la pata, Itadori -respondió Nobara, aunque la sonrisa en su rostro traicionaba la verdadera preocupación detrás de sus palabras.

El auditorio estaba decorado con banderas y pancartas de todos los equipos participantes. Las luces se habían ajustado para enfocar el escenario donde los estudiantes presentarían sus argumentos, y un panel de jueces observaba desde la primera fila, con expresión seria y cuadernos listos para tomar notas.

El formato de la competencia consistía en que cada equipo presentara su caso ante los jueces y luego respondiera a las preguntas. Yuji y Nobara habían preparado un argumento sólido, respaldado por investigación y una estrategia clara para contrarrestar posibles objeciones. Sin embargo, sabían que la verdadera prueba no sería el contenido de su presentación, sino la forma en que lo entregarían juntos, sin dejar que la tensión emocional que había crecido entre ellos los afectara.

Los primeros equipos presentaron sus argumentos con soltura. Algunos eran muy formales, otros más creativos, pero todos mostraban un alto nivel de preparación. Mientras tanto, Yuji y Nobara esperaban su turno detrás del escenario, lanzándose miradas rápidas y nerviosas sin saber realmente qué decir.

Finalmente, el momento llegó.

-Equipo número siete, por favor suban al escenario -anunció el maestro de ceremonias.

Yuji y Nobara intercambiaron una última mirada antes de caminar hacia el centro del escenario. A pesar de los nervios, ambos mantuvieron una postura firme, conscientes de que toda la escuela los estaba observando. Había expectación en el aire; muchos sabían de su rivalidad, y había rumores de que, a pesar de ser un equipo fuerte, las discusiones internas podrían jugarles en contra.

La presentación comenzó sin problemas. Nobara abrió con una introducción poderosa, estableciendo el tono y capturando la atención del público. Yuji siguió con su característico estilo enérgico, desglosando los argumentos de una manera que hacía que incluso los temas más complejos parecieran accesibles. La dinámica entre ambos era fluida, casi como una coreografía bien ensayada. Era evidente que, a pesar de sus diferencias, compartían un respeto mutuo por la habilidad del otro.

Sin embargo, mientras avanzaban en la exposición, la tensión comenzó a subir. Había un momento específico en la presentación en el que debían cambiar el enfoque rápidamente entre los dos, pero cuando llegó el turno de Nobara, Yuji notó que se quedó en silencio por una fracción de segundo. Solo fue un instante, pero suficiente para que él se diera cuenta de que algo la estaba distrayendo.

Nobara parpadeó, recuperando la compostura rápidamente, pero Yuji no pudo evitar preocuparse. Sabía que ese titubeo no era normal en ella; algo estaba rondando en su mente. Intentando cubrir el pequeño vacío, Yuji tomó la palabra con una transición rápida y suave, lo que permitió que el ritmo de la presentación no se viera afectado.