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Debe ser un error.

Eso fue lo primero que pensó Jisung cuando la seguridad de su edificio lo llamó para informarle que una joven le estaba buscando.

¿Por qué alguien lo buscaría?

Casi nadie sabía la ubicación de su hogar, podía contar con una de sus manos las personas que sabían en dónde vivía. Ni siquiera su padre sabía en dónde se alojaba.

Tuvo que abandonar la reunión que tenía en ese momento con el resto del grupo, para ir a ver quién era la dichosa persona. Le había dicho al guarda que no la dejara pasar pero él le dijo que la chica seguía insistiendo, incluso estaba por llamar a la policía, claro, eso antes de que Jisung le avisara que ya estaba de camino al edificio.


Cuando llegó a la recepción de su hogar las cosas tomaron mucho más sentido.

La conocida cabellera negra se asomaba por detrás del guarda, al parecer estaba insistiendo en que la dejaran pasar, pudo escuchar una breve amenaza sobre terminar con el trabajo del pobre señor por esto.

— ¡Ya te dije que Jisung me conoce, ¿Por qué no puedo entrar?! —gritó la chica.

— Señorita, tiene que dejar de gritar o llamaré a la policía.

Los ojos de la joven se abrieron de inmediato, claramente a nadie le gustaría tener problemas legales.

Incluso le pareció una escena graciosa.

— No creo que sea necesario. —interrumpió la conversación.

El hombre mayor al notar la presencia de Jisung se inclinó rápidamente como saludo, cosa que Jisung le devolvió, para luego dirigir su atención totalmente a la menor.

— ¿Puedo saber qué haces aquí? —preguntó.

Las mejillas de la chica se colorearon rápidamente, Jisung pudo notar como dirigía su mirada a cualquier parte menos a él. Quería evadir la pregunta.

— Haerin, te hice una pregunta.

— Me escapé de casa. —habló tan bajito que casi no logra escucharla.

No podía creer las palabras de su hermana, ella nunca haría algo así en una situación normal; era simplemente extraño.

Tomó su mano y subió al elevador del lugar, no podía hablar de algo tan serio en un lugar donde cualquiera podía escucharlos.

Al estar en su departamento dejó que la pelinegra se sentara en la sala y esperó a que siguiera hablando. Aunque Haerin tenía otros planes, porque tomó el control y encendió la televisión.

— ¿No piensas explicarme? —estaba realmente extrañado.

— No hay más explicación, me escapé de casa y ya.

Jisung tomó asiento al frente de ella.

— Sé que me estás ocultando algo, no te escapas de casa solo porque sí.

La joven suspiró y observó sus manos mientras elegía las mejores palabras para tratar de explicarse.

— Mamá y papá pelearon. No es algo nuevo pero esta vez mamá se puso como loca. —sus nervios se podían notar desde lejos— Tiraba cosas y trataba mal a las empleadas, incluso intentó golpearme cuando fui a ver qué pasaba.

No podía creer lo que estaba escuchando, sabía que Yoona estaba loca pero no a tal punto.

— No le dije nada malo ¿Sabes?, pero ella reaccionó de una forma tan agresiva que lo único que hice fue escapar, perdón si te interrumpí algo importante; no sabía a dónde ir.

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⏰ Última actualización: Aug 27 ⏰

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