«Los cobardes temen hasta la felicidad. Pueden herirse incluso con el algodón. A veces hasta la Felicidad les hiere.»
Osamu Dazai
Mientras Lucifer dejaba el cuarto con las cosas para que Julia pudiera acomodarse, Julia que aun yacía sorprendida aun por la ultima respuesta de Lucifer.
Julia: ¿Cuándo compraste los apartamentos? No vi ningún letrero de se vende.
Lucifer mientras sale de la habitación.
Lucifer: Justo ahora ángel y todo esta a la venta si sabes el precio correcto.
Luego de esta conversación Julia desempaca lo poco que tenia de las cajas que no se quedaron en el apartamento inundado.
Mientras ordena un poco el cuarto, nota que no le queda mucha ropa más que la que usa para sus turnos y la que lleva puesta.
Mientras revisa la habitación, nota que aun esa toda la ropa de los padres de Lucifer en sus armarios, de hecho casi todo esta en su lugar, Julia toma uno de los vestidos de la madre que le llamo la atención y sobrepuesta imagina como seria tenerlo, empieza a danzar con los ojos cerrados por la habitación cuando de repente una imagen de ella y Lucifer bailando cruza por su mente, por la sorpresa de estar pensando en Lucifer, da un paso en falso y choca contra la cómoda, dejando notar parte de un cuadro enmarcado que acumulaba polvo tras la cómoda, era un retrato pintado de los padres de Lucifer, los condes de Newheaven, en medio de ellos un pequeño niño de carácter serio, pero esa misma mirada.
Esa misma maldita mirada pensó Julia para sí misma.
Lucifer sin tocar la puerta ni aviso previo
Lucifer: Si deseas ocupar algo del guardarropa de mi madre, adelante, no creo que ella los extrañe.
Julia: Lo siento no quise ser entrometida...y ¿Por qué no tocas la puerta? Pude haber estado desnuda.
Lucifer: Hablo enserio ángel, el cuarto es tuyo, has lo que quieras con el y lo que hay en él, con respecto a tocar la puerta no es habitual para mí, pero me estas queriendo decir ¿Qué tu puedes espiarme y yo no a ti? Eso es cruel ángel.
Julia: ¡Ya te dije que no es así como paso!... oye espera, pero ¿no quieres recuperar nada de este cuarto antes de decir que todo es mío? ¿Ni siquiera el cuadro?
Lucifer: En lo que a mi concierne la casa entera se podría quemar y solo me preocuparía por salvarte a ti ángel, si no quieres la ropa puedes donarla o venderla, supongo que por el cuadro te pueden dar un buen dinero también.
Julia: ¿Algún día me contaras la razón del porque te refieres así de tus padres?
Lucifer: No hay nada que ocultar realmente ángel, pero si juegas bien tus cartas quizá en alguna cita tengas oportunidad de preguntar.
Julia: ¿Me vas a invitar a una cita?
Lucifer sonríe.
Lucifer: ¿Estas esperando que lo haga?
Julia: Si juegas bien tus cartas.
Lucifer: Aprendes rápido, eso es bueno ángel, ahora sé que no debo ser tan dócil contigo.
Julia: Quizá yo deba serlo contigo.
Lucifer: Cuidado ángel, el infierno es caliente.
Ambos se quedan viendo fijamente, Lucifer estaba esperando que Julia lo invitara a pasar a la habitación y algo dentro de Julia quería que pasara, pero todo termino en una sola sonrisa por una llamada que los interrumpió.
Lucifer: Hasta luego ángel, te vere más tarde para la cena.
La llamada era de Larissa, pues no había sabido nada de su amiga desde hace varias horas, lo que no era del todo inusual, pero Larissa sabia mantenerse al tanto de Julia, para bien o para mal.
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Fallen
RomanceLucifer (No, no el Diablo o bueno, casi) sin duda un artista de tendencias nocivas que plasma sus muchos demonios, conoce a Julia, quien Lucifer clama como su Ángel y musa, ahora que se encuentran, sus vidas están apunto de dar un giro de 180° en má...