Llegué al instituto.
No veía a Matt.
Llevaba toda la noche pensando en él. En como contárselo.
Oh mie*rda no le veía, tenía que entrar rápido si no me quería perder la primera clase.
Entré.
Me tiré toda la hora sin hacer nada, no si quiera prestaba atención.
Acabó la clase y salí pitando hacia el aula de Matt.
Pff menos mal, ahí estaba.
Le notaba algo nervioso.
Él seguía sentado, y su profesora seguía dentro aun habiendo tocado el timbre para el cambio de clase.
Al fin una estampida de gente salió por la puerta. Ninguno de ellos era Matt.
Él seguía sentado, pensando.
Pasé a su clase. Cogí una silla y me senté delante suya.
Se puso nervioso al verme.
-Hey, hey, hey- me susurró.- creo que es mejor que hablemos cuando termine la jornada.
-Tengo que hablar urgentemente contigo
-Fire, si me ven hablando contigo, va a pasar algo malo. Por favor sal de aquí.
-Matt, si esto es una broma no tiene ninguna gracia.
-Vete por favor. Te veo en mi casa a las 2:30 para comer. Que no te vea nadie llegar.
En ese momento entró su profesora por lo que tuve que abandonar la sala.
Que bicho le había picado? De que estaba hablando?
Salí a por mi coche en el aparcamiento.
Derrepente un coche me arroyó fuertemente. Caí al suelo.
Me sentia mareada. Me dolía mucho la rodilla.
Tenía una gran herida.
Notaba algo frío en mi cabeza. Lo toqué y vi en mi mano una gran mancha roja. Era sangre. Provocó que me marease, por lo que tuve que sentarme en el suelo.
Miré arriba. El coche no estaba. Solo recordaba que era de color negro pero no pude ver nada mas.
Derrepente una chica se me acercó.
Me ayudó a ponerme en pie.
Me dijo que tenía algo de sangre en la cabeza, pero era una herida pequeña. Tenía el labio partido (posiblemente lo mordí sin querer en la caída).
Aun con mareo, monté en mi coche. Necesitaba ir a casa de Matt.
Ya eran las 3 y salí de aquel sitio infernal. Llegué rápido.
Llamé al timbre y la puerta se abrió en segundos.
Creo que era la madre de Matt.
-Hola, encantada.- derrepente me miró y quedó en silencio.- oh dios mio muchacha... Te encuentras bien?- que les pasa en esta casa con esa pregunta? Me había pillado un coche muy bien no estaba.
-Hola. Soy Fire. Esta Matthew?
-Sí. Sube a su cuarto. Ahora te subiré un botiquín, y tu misma te podrás curar la herida, si necesitas ayuda avisame.
-Muchas gracias. Eres muy amable.-
Entre en la casa. Subí las escaleras. Él estaba dado la vuelta en su silla, mirando a su escritorio, y se giró al oír como cerraba la puerta.
-Oh mie*rda Fire! Te lo dije! Sabía que iba a pasar esto! - Se hecho las manos a la cabeza.
-Matt. Qué sabes sobre esto? - le pregunté, mientras me sentaba lentamente en su cama.
