La manada

Karting

Habían pasado cinco meses desde que Max se unió a la manada y ya estaba integrado en ella. Max sabía que Seb era el que pedía mimos y palabras dulces, Kimi la de comida y abrazos, Nando el cómplice de bromas y cosas “peligrosas” y Michael, el tío Mich, era el que pedía dulces y juguetes (siempre lo había hecho por Mick).

Pero había una cosa que Max no se atrevía a preguntar: el karting. Le encanta el karting incluso después de todo lo que le hizo su padre, y no puede soportar renunciar a su afición, a su sueño. Pero, ¿cómo puede decirles a Seb y a Kimi que después de todo todavía quiere ir al karting? Que después de todas las pesadillas que tuvo con su padre obligándolo a conducir incluso sin poder sentir sus manos, todavía quiere competir en karting.

"¿Qué pasa, cachorro?", le pregunta Seb, alborotándole el cabello mientras se sienta a su lado en el sofá de la sala de la manada.

"Nada", dice mientras acomoda el osito en su regazo. Seb sonríe y lo atrae hacia sí para abrazarlo. Se quedan así hasta que la sala se llena, todos los conductores que vienen solos o en grupos llenan ahora la sala.

"Maxy" Es su tío Michael con quien habla, ya lo conocía antes de unirse a la manada por lo que era más cercano a él que a los demás, a excepción de Kimi y Seb obviamente. "La semana que viene es el cumpleaños de Mick, él quiere invitarte pero estaba nervioso así que quería que yo te lo preguntara primero. ¿Qué te parece?"

"¿Quiere invitarme?" pregunta Max un poco incrédulo, nunca ha ido a una fiesta de cumpleaños "Por supuesto que quiero ir" Michael le sonríe ampliamente, al igual que Seb y Kimi.

La invitación llegó unos días después, tiene un coche de fórmula 1 rojo en el exterior y un dibujo de una pista en el interior, al lado unas palabras que Max no puede leer.

"Necesito ayuda, ¿puedes leerme esto, Kimi? Por favor", pide Max con su voz infantil llena de emoción.

"Claro que puedo, cachorro", acepta el finlandés sentándose en un sillón, Max se sienta en el apoyabrazos del mismo, mirando la tarjeta mientras espera. "Bueno, estaba equivocada, en realidad no puedo leer esto", dice Kimi después de unos segundos. "O está muy mal escrito en inglés o es alemán. Creo que Seb es el hombre indicado para esta tarea, Maxy"

Max se levanta al instante y camina hacia la habitación contigua a la suya. Están alojados en un hotel, la habitación de Kimi y Seb está al lado de la de Max, con una puerta entre ellos. Max cruza esa puerta para ir a la habitación del otro, dejando a Kimi sola.

"¿Puedes leerme esto? Por favor", le pide a Seb, haciendo que la última palabra sea más larga de lo necesario.

"Claro, dejame ver" Max le da la tarjeta a Seb, y el otro se agacha para estar a la altura de Max "Oh, esto es alemán" Sebastian lo lee en el idioma original antes de hacer una traducción al cachorro, todos están tratando de enseñarle a Max un poco de su idioma "Mick te invita a su cumpleaños, este viernes en The Red Baron Karting" Seb sonríe y desaparece al decir la última palabra, la de Max no.

Seb y Kimi pasan los siguientes días preocupados por Max y cómo reaccionará al estar de nuevo en una pista de karts. Al final deciden que lo mejor que pueden hacer es no hacer nada, simplemente estar con él pase lo que pase. Llega el día y Max está muy emocionado, se mueve nervioso en el asiento trasero del coche.