El comienzo de un amor

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Mi despertador sonó a las siete, como prácticamente todos los días, me estire y fui a ducharme. Cuándo terminé me vestí con unos vaqueros rotos y una camisa blanca. Fui al armario de mi hermano a robarle su gorro blogger blanco, en el fondo me encantaba cogerle ropa a mi tontito. Fui a prepararme un té cuando vi a Niall sentado en una de las sillas bebiendo un café.

Niall: buenos días

Yo: hola tontito.

Niall: ¿por que sigues cogiendo mis cosas?

Deje hirviendo el agua, me acerqué a mi hermano y le di un beso en la mejilla. Este sonrió de medio lado y bebió un sorbo de café.

Niall: por que preguntare cosas tan obvias.

Metí mi té en un termo, cogí mi bolso y salí de casa en dirección a mi curro.

Sobre las nueve y media estaba ahí, entré y empecé a colocar todo para cuándo llegara The Wanted.

A las diez en punto llamaron a la puerta, abrí y me encontré a un chico un poco más alto que yo, llevaba un gorro blogger gris y de su pelo castaño solo se podía ver el flequillo. Sus ojos estaban tapados con unas gafas de sol negras. Llevaba puesto una sudadera negra con unos vaqueros y unas converse.

Xxx: hola soy Nathan. He llegado un poco pronto lo siento.

Yo: no hay problema. Pasa por favor.

Pasó y se sentó en el sofá negro que estaba en medio del croma blanco. Mi cámara ya estaba lista para ser usada. Se quitó las gafas y pude ver sus ojos verdes como la hierba en primavera. Me senté a su lado con mi termo de té humeante, la estancia se lleno de un dulce aroma a mora.

Nathan: huele bien.

Yo: sí... Dios soy una maleducada no te he ofrecido nada.

Me levanté y noté que su mano me agarraba la muñeca derecha, mi pulso se aceleró.

Nathan: no pasa nada, tranquila.

Me volví a sentar y le ofrecí un poco de té. Bebió un sorbo y me lo volvió a pasar. Estuvimos hablando un buen rato. Nathan no paraba de toquetearme el pelo, sus ojos verdes me miraban con ternura y en ningún momento desapareció esa sonrisa tan bonita que me tenía enamorada. Nos fuimos acercando hasta que ambos pudimos sentir nuestro pulso ir acompasado. Giró su cabeza ligeramente y acarició mi nariz con la suya, sus labios estaban cerca de los míos. Nathan se acercó un poco más y me besó. Le aparté, no quería empezar una relación o algo parecido. No en este momento. Nathan se apartó bruscamente de mí.

Nathan: lo...lo siento... No pretendía...pero...no he podido aguantarme...lo siento...de verdad.

Apoyó sus codos en sus rodillas y cruzó sus manos tras su cabeza. Me acerqué a él y le abracé, no quiero hacer que se sienta culpable. Me miró y le sonreí. Me acerque a su mejilla y se la besé.

Nathan: ¿me das otro?

Su voz ronca se volvió más dulce y su sonrisa como la de un niño travieso que pedía dulces antes de cenar. Sonreí y le di otro beso en la mejilla. Sobre las once llegaron el resto de los chicos. Todos se quedaron con la boca abierta al verme, supongo que por mi edad: solo tengo dieciocho años. Les invité a pasar y todos se sentaron en el sofá, cogí un taburete de mi cocina y me senté.

Yo: bueno... Me llamo Iris.

Todos me saludaron con la mano, uno de ellos que tenía los ojos grises y el pelo rapado al cero no dejaba de mirarme. Mire con el rabillo del ojo y vi a Nathan mirándole celoso.

Yo: ¿quereis fotos individuales o en grupo?

Uno de los chicos fue quien respondió, tenía el pelo rizado no muy largo parecido a Harry y sus ojos eran tan azules como la noche.

Secrets (one direction, the wanted y demás famosos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora