Sonidos Del Corazón |TaeGi|

✨7✨

Yoongi salió del apartamento de Taehyung aquella noche con el corazón destrozado. Cada palabra que habían intercambiado lo quemaba por dentro. Sentía que, a pesar de todos sus esfuerzos, había fallado en proteger a la persona que más amaba. Al llegar a su apartamento, cerró la puerta detrás de él, cayendo pesadamente en el sofá. No tenía fuerzas para nada; la oscuridad a su alrededor reflejaba perfectamente su estado mental.

Los días que siguieron fueron un torbellino de desesperanza y tristeza. Yoongi dejó de responder mensajes y llamadas, ni siquiera a Namjoon. Las cortinas permanecieron cerradas, sumiendo el apartamento en una penumbra constante. Apenas comía y no tenía energía para levantarse de la cama. Pasaba horas acostado, inmóvil, sin fuerzas para enfrentar el dolor que lo consumía.

Namjoon, preocupado por el silencio de Yoongi, decidió ir a su apartamento. Usó la llave de repuesto que Yoongi le había dado años atrás. Al abrir la puerta, el estado del lugar lo dejó impactado. El aire estaba cargado de un olor a humedad, sudor y desesperación. Encontró a Yoongi en el sofá, su cuerpo demacrado, su rostro pálido y sus ojos hundidos, mostrando signos claros de no haber dormido ni comido en días.

-Yoongi...- murmuró Namjoon, sentándose junto a él, su voz llena de preocupación.

Yoongi apenas reaccionó, su mirada estaba vacía, como si no hubiera nadie en casa. Namjoon, sintiendo que el tiempo apremiaba, lo tomó por los hombros y lo ayudó a levantarse.

-Vamos, necesitas levantarte. No puedo dejar que te hundas así- dijo Namjoon con determinación, guiándolo al baño.

Yoongi se dejó llevar, sin oponer resistencia. Namjoon lo ayudó a desvestirse y lo guió bajo el chorro de agua caliente. Mientras el agua corría, Namjoon lavó su cabello, limpiando su cuerpo demacrado. Yoongi estaba casi catatónico, pero mientras Namjoon lo ayudaba a vestirse, algo dentro de él comenzó a desbordarse.

Ya de vuelta en el sofá, Namjoon se sentó junto a él, frotando suavemente su espalda, esperando que Yoongi hablara. Finalmente, las palabras comenzaron a salir, primero en susurros, luego en un torrente imparable.

-Todo salió mal, Joon...- empezó Yoongi, su voz quebrada -Lo Intenté... intenté protegerlo, pero solo lo hice peor. Hyejin... ella... ella lo manipuló, lo usó. Y él... él me dijo que no podía entender su dolor, que no era el mío. Y tenía razón... pero duele, Joon... duele tanto-

Namjoon escuchaba en silencio, sintiendo cada palabra como un golpe. Mientras Yoongi hablaba, sus lágrimas comenzaron a caer. Se desplomó sobre las piernas de Namjoon, llorando con una desesperación que lo consumía por completo. Namjoon, sin decir una palabra, siguió frotando su espalda, permitiendo que su amigo liberara todo el dolor que llevaba dentro.

-¿Por qué... por qué me siento tan vacío sin él?- sollozó Yoongi, aferrándose a la camiseta de Namjoon -Lo he perdido todo, Joon... todo-

Namjoon, sin dejar de consolarlo, empezó a darse cuenta de la gravedad de la situación. Sabía que Tae estaba solo con Hyejin en su apartamento, una situación que solo podía empeorar. Tomó una decisión rápida, sacando su teléfono y llamando a Jin, quien había llegado al país recientemente.

-Jin hyung, necesito tu ayuda- dijo Namjoon en voz baja, tratando de no alterar más a Yoongi -Es urgente. Tae está solo con Hyejin, y Yoongi... Yoongi está destrozado. No puedo dejarlo así-

Jin, entendiendo la gravedad de la situación, respondió de inmediato.

-Esa perra volvió, voy para allá, Joon. No te preocupes, me encargaré de Tae. Tú quédate con Yoongi-

Después de colgar, Namjoon volvió su atención a Yoongi, quien parecía haberse quedado sin lágrimas. La desesperanza en sus ojos era evidente, y Namjoon supo que tenía que hacer algo más. Recordando la relación tensa entre Yoongi y sus padres, decidió tomar un riesgo. Salió al pasillo y marcó el número de los padres de Yoongi, con quienes había mantenido contacto en secreto.