--¡Ya traje el vino blanco!-- Dije sonriendo mientras me sentaba en la mesa. Traté de ignorar completamente lo que había pasado con Koko... quise echarle la culpa al alcohol... era tarde y seguro estaba muy bebido... sí, seguro era eso...
La noche avanzaba cada vez más, se hacía tarde y los invitados se estaban yendo. Yo estaba con Mikey en la pista de baile, bailando una canción lenta.
--Princesa, tú me amas a mi y sólo a mi... ¿verdad?-- dijo Mikey mientras agarraba mi cintura de manera posesiva, incluso agresiva.
--Sí Mikey, yo solo tengo ojos para ti-- Dije sin ninguna duda, al parecer esa respuesta le dejó a Mikey bastante satisfecho, eso lo pude notar porque el agarré agresivo de mi cintura se convirtió en una caricia amorosa.
--Bien, porque vas a casarte conmigo... y vamos a envejecer juntos... y piensas darme muchos hijos, porque eres mía, si?-- Mikey dijo poco a poco acercándose a mi oreja, hasta que sus labios estaban prácticamente acariciando mi oreja, entonces él dijo:
--Y si veo que tienes algún tipo de dudas sobre ello, me aseguraré de demostrártelo~--
En el preciso segundo que dijo eso me puse completamente roja y miré a Mikey sorprendida. --Mikey! No digas eso... ay... aún soy menor... ay... -- estaba tan nerviosa que apenas podía hablar, en el fondo sí me apetecía, pero me daba pena. Todos mis pensamientos fueron interrumpidos por otro comentario de Mikey --Mi princesa, __, por qué no vas al dormitorio y te cambias~?--
Me sonrojé algo más pero asentí y corrí al dormitorio. Una vez llegué ahí, abrí mi armario, pero entonces, decidí ponerme nada más que una camisa se Mikey, sabía que eso le excitaría. Corrí al armario de Mikey y lo abrí...
caí al suelo del susto mientras lágrimas caían de mis ojos al ver lo que había dentro...❤🍓❤🍓❤🍓❤🍓❤🍓❤🍓❤🍓❤🍓
Sé que me demoré demasiado en continuar, trataré de actualizar más
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TÚ ME SALVASTE (Mikey (Boten) x T/N)
RandomUna joven niña fresa de 17 años salva del suicidio a un chico de 21, líder de una mafia muy poderosa llamada Boten, prometiendo quedarse con él para siempre. Sólo que ella no sabe lo muy lejos que esa promesa le llevará.