Mision en cubierta (Bakudeuku)

5. Hakamada

La pareja salió del hotel y avanzó unas calles al sur, Izuku iba nuevamente con su despampanante vestido rojo, iba de la mano de Takeru la falsa identidad de Katuski

—¿Podrías caminar un poco más despacio? — pidió suavemente Izuku — me duele mi cuerpo, después de lo de anoche

Katsuki sonrió de lado, pero hizo lo que le pidieron — podemos repetirlo esta noche, para que tu cuerpo se vaya acostumbrando de nuevo — susurro haciendo que Izuku se pusiera rojo.

Izuku iba a responder, pero su teléfono comenzó a sonar, vio que era de Hakamada así que contestó

—Hola

—Hikari, que bueno que respondes — se escuchó la voz de Hakamada del otro lado de la línea, Katsuki se acercó lo suficiente para escuchar

—¿estas bien? — preguntó fingiendo preocupación — anoche intente llamarlos, pero no me respondieron

Katsuki frunció el ceño, ¿Por qué mentirle a Izuku? Cuando él se comunicó con Hakamada anoche, le hizo un gesto con la mano para que le siguiera el juego

—Perdón con todo lo que paso me quede sin batería — se disculpó con lo primero que se le ocurrió decir — ¿tienes idea de que fue lo que paso? Anoche estuve muy cerca del objetivo

—Sí, Hikari, lo que sucedió anoche fue un desastre total, aún no sabemos qué fue lo que paso o quien fue quien atacó, lamentablemente con toda la conmoción nuestro objetivo escapo, nuestros superiores están furiosos.

—Lo sé, pero Hakamada, ¿crees que puedas averiguar más? Takeru solo me mencionó que debíamos mantenernos en cubierta hasta esperar indicaciones

—También por eso te llamaba, hay que reunirnos en el restaurante que esta sobre la calle principal, ahí te puedo explicar mucho mejor la información

Hakamada tenía la encomienda de obtener la ubicación del objetivo por lo que su idea era atraerlo a un lugar donde Kai podría llegar y llevárselo sin problema y por lo que estaba escuchando en ese momento Izuku le daba a entender que estaba solo.

La pareja intercambio una mirada, algo no cuadraba pues en lo que se alistaban Katsuki le había contado todo a Izuku y la versión que Hakamada le estaba contando a él no aprecia lo mismo

—Está bien, Hakamada, nos veremos allí en dos horas —respondió Izuku, tratando de sonar lo más natural posible.

—Perfecto, Hikari nos vemos pronto —contestó Hakamada, cortando la llamada.

Izuku bajó el teléfono y miró a Katsuki quien entendió perfectamente el semblante de su prometido

—Presiento que Hakamada sabe algo que nosotros no — comentó Izuku

—Definitivamente algo me dice que él está involucrado en lo que paso anoche — concordó Katsuki

—¿Debería ir?

—No, no iras solo a ese lugar, siento que es una trampa

—¿Qué propones?

—Iré yo primero, intentare averiguar si ese bastardo de Hakamada está tramando algo, tú te mantendrás a unas calles — respondió tomando la mano de su prometido y comenzando nuevamente a caminar, una media hora después llegaron al estacionamiento de un centro comercial y subieron al auto del cenizo

—Vamos a mi departamento está a diez minutos si acelero — ahí tengo ropa que podemos usar para pasar desapercibidos.

Katsuki encendió el motor y se dirigieron al departamento donde ambos se cambiaron de ropa, Izuku ahora lucía un una falda corta arriba de las rodillas de color negro, una blusa blanca básica fajada, llevaba unas hermosas balerinas y su peinado era suelto, su maquillaje era sutil

—No entiendo cómo es que tienes todo esto en tu departamento, Kacchan — comentó Izuku saliendo de la habitación para llegar a la sala donde Katsuki llevaba puesto unos jeans, tenis y una básica negra.

—Son tus cosas mi amor, ¿no lo recuerdas? — Katsuki se acercó como depredador acorralando a Izuku contra la pared — me dan ganas de no dejarte salir así y quitarte poco a poco ese conjunto —susurro contra el cuello de Izuku causando un escalofrió placentero en el menor

Izuku se queria dejar llevar por ese momento, deseaba tener más de Katsuki pero no podían permitírselo, sus brazos rodearon el cuello de su prometido y lo beso con deseo, se separaron cuando el aire comenzó a faltar entre ellos.

—Podemos repetir lo de anoche, más tarde, cuando sepamos que es lo que planea Hakamada, —contestó con dificultad aun no recuperaba su respiración.

Katsuki gruño en respuesta, pero sabía que Izuku tenía razón, así que lo tomo de la mano y tiro suavemente de él para ir a su auto, llegaron con unos diez minutos de sobra, Izuku se quedaría en una cafetería cercana, utilizarían un dispositivo de comunicación en su oído, para escuchar todo y poder comunicarse por si era necesario

—Ve con cuidado Kacchan — pidió Izuku antes de entrar a la cafetería, pidió un café late con unas galletas y se sentó en la parte de atrás donde podría pasar desapercibido, pero podía ver a través de la ventana.

Katsuki entró al restaurante y pidió una mesa cerca de Hakamada, tuvo que sobornar a la recepcionista de la entrada y a unos meseros, pero eso era mejor que nada. Observó como su compañero de trabajo se veía cada vez más nervioso

—¿Puedes verlo Kacchan? — se escuchó en su oído

—Si — susurro sabiendo que su prometido lo escuchaba claramente — se ve muy extraño, nervioso o ansioso, si te marca no contestes, apágalo

—Pero, Kacchan ¿si pasa algo?

—Si pasa algo, lo enciendes además ya tenemos nuestro punto de reunión

—De acuerdo — acepto Izuku tomando su teléfono y apagarlo

Unos minutos después, cuando Katsuki ordenó lo más complicado de preparar del menú para ganar tiempo, vio como Hakamada observaba con nerviosismo su reloj, y unos segundos después tomaba su teléfono y soltó un suspiro frustrado. Katsuki sonrió de lado pues sabía que le había hablado a su novio y este lo mandaba directo al buzón.

—¿y bien? ¿Dónde está? — la voz de Kai se escuchó, Katsuki lo vio de reojo mientras tomaba asiento frente a Hakamada

—Ya no ha de tardar señor — respondió con pánico en su voz — Izuku Midoriya acordó en vernos en este lugar ya no debe tardar

—sabes lo que pasara contigo si me fallas, ¿verdad? — preguntó con voz plana y fría — quiero a ese chico, ¿qué sucederá si mientes?, Hakamada — preguntó Kai inclinándose hacia adelante para intimidar más al hombre frente a él.

—Anoche ese hermoso peliverde estaba en mis manos, pero mis hombres fueron demasiado torpes y lo dejaron escapar — comentó Kai — no soportare otro error como ese Hakamada, ¿Comprendes?

Katsuki escuchaba perfectamente lo que comentó Kai, eso quiere decir que desde un inicio el mismo Kai con la ayuda de Hakamada planearon todo para secuestrar a su novio, apretó los puños bajo la mesa intentando no pararse en ese momento y arruinarlo todo.

—Kacchan — se escuchó nuevamente la voz de Izuku, después de todo él también había escuchado perfectamente lo que escucho su prometido. — debes tranquilizarte si queremos atraparlo — pidió por no decir que le rogo.

Kai se recostó en la silla, manteniendo su mirada fija en Hakamada, quien comenzaba a sudar por la presión. —Espero que estés diciendo la verdad, porque si mi tesoro, ese hermoso de Izuku Midoriya no aparece pronto, tendrás que pagar las consecuencias de tu fracaso — amenazó Kai.

—Señor, le juro que Izuku vendrá, él...está en su papel de Hikari — hablo con pánico en su voz.

—Iré al baño Hakamada y espero que mi tesoro este aquí, cuando regrese, si no, ya sabes las consecuencias.

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¿Qué creen que pase?