3. Revelación

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El teléfono que usaba para la misión no paraba de vibrar, no se queria levantar, pues el amor de su vida que dejo tiempo atrás estaba acostado junto a él durmiendo profundamente, pero si no apagaba el teléfono muy seguramente lo despertaría.

Se puso de pie y caminó hasta donde se encontraba el teléfono tirado en el piso, al revisar de quien era la insistente llamada, decidió contestar.

—¿Sí? —Habló en voz baja

—Takeru hasta que contestas — la voz de su compañero se escuchaba entre preocupada y aliviada — ¿Dónde estás?

Katsuki luego del ataque y la idea de un traidor no queria dar su paradero y más que ahora estaba con Izuku.

—Estoy en cubierta aun, logramos salir Hikari y yo — respondió — ¿tienes idea del que sucedió? Y ¿Por qué no se nos notificó del atentado? ¿no se supone que estarían vigilando?

— Eso es lo que estamos tratando de averiguar —respondió la voz al otro lado del teléfono— No recibimos ninguna señal de un ataque, además atacaron a quienes estaban vigilando cualquier movimiento, no hubo sobrevivientes, sospechamos que alguien nos traicionó.

Katsuki frunció el ceño, sintiendo un malestar en el estómago. No le gustaba nada la idea de que alguien dentro de su equipo pudiera haberlos traicionado, observó hacia la cama, donde Izuku dormía tranquilamente, ajeno a la conversación.

—Mantente en cubierta y no regreses a la base hasta nuevo aviso —continuó su compañero—. Si hay un traidor entre nosotros, debemos asegurarnos de que no sospeche nada

—Entendido —respondió Katsuki antes de colgar el teléfono.

Volvió a la cama, deslizando con cuidado para no despertar al peliverde, lo envolvió en un abrazo e Izuku se acurruco más cerca de él inconscientemente, eso causo una sonrisa en el cenizo, mañana verían que harían.

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—¡Son unos idiotas! — La voz de Kai sonaba con enojo puro, estaba molesto sus planes habían sido frustrados todo por un subordinado que no siguió las indicaciones al pie de la letra.

Dicho subordinado yacía en un charco carmín en el suelo mientras Kai descargaba su ira sobre los demás incompetentes que dejaron ir a su presa.

—¿Cómo pudieron fallar de manera tan estrepitosa? —Kai se acercó al hombre que había intentado disculparse, — La idea era simple: secuestrar al agente vestido de chica, terminar con el agente encubierto que estaba cerca de ella y huir de ahí.

—Señor, escuchamos la explosión y nos concentramos en protegerlo, si nos hubieran comunicado que su plan era...

—¡Silencio! —Kai gritó mientras disparaba al hombre se había movido, el despacho se sumió nuevamente en silencio tenso que solo se rompía por el eco de la detonación — Es la última vez que fracasan, la próxima que suceda esto tendrán una bala atravesada — Amenazó el castaño.

Kai salió de su despacho y se dirigió a su habitación cerrando la puerta de un portazo, una vez dentro pateo la mesita de noche, haciendo que se quebrara, un marco con una foto de un peliverde cayó, había conocido a Izuku Midoriya hace más de diez años, queria acercarse a él de manera "pacifica" porque para él ese chico irradiaba luz, una luz que solo él debe poseer.

𝙵𝚕𝚊𝚜𝚑 𝚋𝚊𝚌𝚔

𝙳𝚒𝚎𝚣 𝚊𝚗̃𝚘𝚜 𝚊𝚝𝚛𝚊́𝚜

—𝙺𝚊𝚌𝚌𝚑𝚊𝚗 𝚖𝚒𝚛𝚊— 𝙺𝚊𝚒 𝚜𝚎 𝚎𝚗𝚌𝚘𝚗𝚝𝚛𝚊𝚋𝚊 𝚎𝚗 𝚎𝚕 𝚌𝚎𝚗𝚝𝚛𝚘 𝚌𝚘𝚖𝚎𝚛𝚌𝚒𝚊𝚕, 𝚎𝚜𝚎 𝚍𝚒́𝚊 𝚒𝚋𝚊 𝚜𝚘𝚕𝚘 𝚢 𝚗𝚘 𝚕𝚕𝚎𝚟𝚊𝚋𝚊 𝚜𝚞 𝚌𝚞𝚋𝚛𝚎𝚋𝚘𝚌𝚊𝚜, 𝚙𝚘𝚌𝚊𝚜 𝚙𝚎𝚛𝚜𝚘𝚗𝚊𝚜 𝚕𝚘 𝚌𝚘𝚗𝚘𝚌𝚒́𝚊𝚗 𝚜𝚒𝚗 𝚎́𝚕 𝚊𝚜𝚒́ 𝚚𝚞𝚎 𝚎𝚛𝚊 𝚜𝚎𝚗𝚌𝚒𝚕𝚕𝚘 𝚙𝚊𝚜𝚊𝚛 𝚍𝚎𝚜𝚊𝚙𝚎𝚛𝚌𝚒𝚋𝚒𝚍𝚘.

Mision en cubierta (Bakudeuku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora