¿Que hacía ahi exactamente? Harry no lo sabía con exactitud, o bueno... tal vez fue que se sorprendió mucho al enterarse que su madre iría.
Así que ¿por qué no ir? Si Anne podía, el también, la cosa era que no estaba seguro de poder soportar ver a Niall cantando canciones que, muy en su interior deseaba que fueran para él, porque en algún momento de la vida así se lo dijo Niall.
— ¿Estas seguro de ir? — preguntó su madre cuando entró a su habitación.
— Casi parece que no quieres que te acompañe.
— No es eso, solo que sé lo que pasa cuando se reencuentran.
Harry la cuestionó con la mirada >>¿que es lo que pasa?<<
— Solo no los quiero ver quejarse del otro cuando claramente ambos tienen culpas que se niegan a aceptar y tu hijo... bueno, eres un terco de lo peor.
Y se fue, sin darle posibilidad de contestar. A veces creía que Anne quería más a Niall que a él mismo, tal vez era porque eso es lo que causaba con todo el mundo, simplemente era adorable. Además de que les encantaba hablar a escondidas de él.
Desde antes de llegar al concierto ya sabía que llamaría la atención y agradecía que Niall le hubiera dado entradas especiales a su madre o estaría sufriendo.
— Entonces él fue el que te invitó — estaba indignado, y es que, Niall nunca le sugirió ir a él.
— Sí, le dije que me encantaría verlo en el escenario alguna vez en la última llamada que tuvimos.
— No sabía que hablaban.
— Sí, él si responde mis mensajes, ya sabes, me sigue en instagram.
Entonces Harry se indignó aún más, su madre sabía perfectamente que las redes sociales nunca se le dieron.
Iba a contestar pero Niall iniciando el show lo distrajo, porque... ¿Siempre se había visto así de caliente? ¿Desde cuando tenía semejantes brazotes?
Después de eso solo dejó de pensar y toda su atención fue opacada por Niall e hizo lo que había querido desde hacer años y que él le negó. Brincó, bailó, cantó e incluso silbo.
Harry quería que Niall lo viera salir, quería herirlo, desconcentrarlo y desorbitarlo.
Deseaba que toda la atención se posara única y exclusivamente en él, que sus ojos solo lo enfocaran a él, que después de tanto tiempo sin verse le robara el aliento una última vez. Quería asombrarlo y llamar su atención.
Anhelaba escucharlo decir su nombre ante el público, pero él... él no lo hizo.
El problema de amar a alguien es que idealizas sus acciones. Crees conocer tanto a la otra persona que casi sabes sus siguientes movimientos, pero, cuando realiza cosas distintas a las esperadas te sientes traicionado sin que exactamente te hubiera lastimado.
Harry había sido víctima de eso por muchos años, deseaba ser tanto el centro de atención de Niall que no concebía que su novio fuera un alma libre con miles de amigos.
¿Por qué Niall querría mas amigos si ya lo tenia a él? Su terapeuta le ayudo a responder esa pregunta cuando Niall lo mandó a terapia al terminar su relación.
Cada persona tiene derecho a su individualidad, a tener una vida además de su pareja, tener distintos intereses y amigos.
El problema era que Harry solo pensaba en Niall y es que en realidad nunca fue mucho de amigos. Y su novio... bueno, él tenia mejores amigos en cada esquina.
Cuando Niall lo decepcionaba Harry no le hablaba por meses, se emborrachaba seguido y escribía a diario. Luego producía su música y sacaba álbum, se distraía en las entrevistas, promociones y giras que no se daba la oportunidad de enterarse como estaba Niall.
Pero claro que cuando sacaba álbum lo escuchaba de inmediato para poder saber si alguna canción era dirigida a él. La cosa era que todas lo eran. Entonces Harry regresaba casi de rodillas a él.
Niall casi siempre tenía los brazos abiertos porque se sentía culpable por no haber cumplido con las expectativas de Harry. Pero, al reflexionarlo con el tiempo se dio cuenta de lo cansado que se vuelve hacer todo pensando en la comodidad y satisfacción de alguien más, con el miedo constante a decepcionar. Así que, si Harry no lo amaba por como era, pero si por lo que esperaba de él mediante ideas demasiado altas que no le podía cumplir, lo mejor era que se separaran.
Y así fue, no regresaron por cinco años. Porque Niall nunca iba a ser capaz de mostrarle al mundo cuan enamorado estaba de Harry. Jamás lo besaría frente a nadie del público y nunca admitiría que todas sus canciones son sobre él.
Niall no era de mostrar amor en público porque le incomodaba que al dejar entrar a la gente en su vida privada se sentían con la atribución de opinar en cosas que no les incumben.
Pero Harry era terco y berrinchudo muy a menudo, además de celoso e irracional. Se enojaba por pequeñeces y lo hacía sentir mal por cosas muy simples.
Así que lo dejó para siempre... o eso creyó hasta que lo vio en su concierto... ¿Por qué no se había rasurado?
Sintió sus pies temblar y sus manos sudar, ¿en serio estaba ahí o solo era que lo extrañaba tanto que lo imaginaba? No, estaba cuerdo, obviamente era él.
Trató de verlo entre la gente y cuando saludó a su Amelia sintió un hueco en el estómago. ¿No era ese su Harry enojón y celoso?
Trató de terminar y dar un buen espectáculo y de inmediato fue a camerinos con la esperanza de encontrarlo ahí. Ni siquiera se percató de como lo felicitaban, tampoco de como Amelia se acercaba para pedirle un beso... solo quería ver a Harry.
Sabía que estaban en un circulo vicioso pero no podía evitar sentir su pecho ir más rápido por la emoción de verlo.
Así que tomó su chaqueta, se cambió de tenis y salió corriendo a su auto... quería verlo y sabía en dónde encontrarlo. Todo carecía de valor, no iría a otro lado sin él nunca más.
— Niall, cariño...
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Esperen la segunda parte, esto va para BenibuStoran1
