Mafia Roja. Ls

XX: Sin solución

Aun con los ojos cerrados y con el instinto a flor, los latidos del contrario sonaban debajo de él, los pocos vellos de su barbilla se restriega en su mejilla y ríe por las cosquillas que le ocasiona. Se siente tan cómodo, como si no hubiera ni una preocupación o problema, como si fueran unas personas normales.

Harry dormía luego de caer rendido, eran las ocho de la mañana y tenían un día largo por delante, había un almuerzo familiar a las once, pero asistir no estaba en sus planes. Mamá le había mandado algunos mensajes en el transcurso de la noche, comentando acerca de lo encantados que estaban todos con su aparición, cosa que solo le causo gracias, si eran reservados por todo lo que vivían ¿Qué podía hacer?

Tiene varios compromisos de su empresa que resolver, algunos zooms que responder con Niall que esta a cargo de todo por su falta, le recuerda mandar al archivero los bocetos del mes y el vestido de Aitana a donde tiene que ser guardado, la boda seria en menos de dos semanas, si todo salia bien.

No se olvida de lo más importante, su bebé que está justamente despierto y una de las niñeras le manda fotos de su bebé comiendo mini hotcakes, el tiempo había pasado tan rápido que el pequeño ya tenia más del año, Harry y el han dado mucho por ese pequeño, se resumía a su vida entera, y faltaba mucho más por cuidarlo.

Cierra los ojos después de mandar el último mensaje, Harry aún lo abraza y no se le ve motivo de despertar pero tienen que hacerlo.

"Harry". Le dice en voz baja a la vez que voltea a verle, sus pestañas eran tan largas que solía tenerles envidia.

"No quiero levantarme". Obtiene su respuesta al instante con su voz ronca, típico en las mañanas.

Louis se contagia de risa, no sabe porque pero lo hace y el rizado alza una ceja a su dirección.

"Levanta el trasero de la cama, tus tarados no tardan en llegar y sigues desnudo".

Recordando la noche anterior se asoma debajo de la sábana para comprobar que no estaba vestido.

Gruñendo se levanta sin pena quedando desnudo frente a Louis, este se sonroja y voltea a otro lado tratando de buscar mejor su bata.

La puerta de la entrada es tocada, el aún estaba desnudo y lo cubría solo una bata, aun así va a ver quien es, y valla sorpresa, se le hacía tan raro que estén allí.

"Buenos días jefe número dos".

"Número dos tu trasero, baboso".

"¡Te extrañe tanto Louis!". Le dice con sarcasmo Zayn.

"¿Y Harry?". Dylan cuestiona dejando café en la mesa junto una caja de donas. "Les trajimos el desayuno, no solo venimos a molestar".

"No, ustedes nunca molestan".

La puerta se abre de la nada, todos voltean hacia allí para ver entrar a Liam junto a Luke. Louis voltea hacia otro lado restando importancia a su presencia.

Aun no logra tener una conversación con el, no le interesa y no quiere ni arriesgarse en compartir algún dato de él, el contrario tampoco se acerca solo hace lo que tiene que hacer con Harry, hasta allí.

"Estoy de buenas así que díganme que descubrieron para poder seguir estando así". Harry entra cambiado con un pantalón negro de vestir y una camisa blanca con las mangar remangadas y los primeros botones abiertos, Louis le sonríe desde su lugar.

Su esposo llega con el y le besa.

"Ve a cambiarte, no andes exibiendote"
Le susurra en el oido.

Louis se ríe y hace caso desapareciendo de la vista de todos.