Capítulo 18: La Fiesta

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Al día siguiente era la fiesta de bienvenida del Embajador Enji Todoroki a Ciudad República. Una fiesta importante, sabía Izuku. Según Todoroki-kun, era una fiesta bastante exclusiva, donde sólo la gente más importante de la ciudad iría. Políticos, empresarios, influencers, etcétera. Creía que hasta la presidenta iba a estar, lo cual era un poquito intimidante.

E Izuku iba a ir como invitado de Shoto Todoroki, junto con varios amigos suyos que formaban parte del equipo de los perros leones.

La verdad es que Izuku no estaba emocionado por la fiesta en el sentido de ir a... Festejar a nadie. Sólo necesitaba quizás uno o dos días sin Kacchan cerca. Después de lo que pasó ayer... no se sentía bien.

Izuku conocía a Kacchan muy bien, y sabía que podía ser arisco, y que quizás la intromisión de Todoroki en su secreto podría haber sido un poquito invasiva y hasta como un quiebre en la sensación de seguridad que tenían hasta el momento.

Pero no pudo evitar tener un poco de miedo ante las palabras finales de Katsuki el día anterior.

"Fin de la discusión"

¡¿De dónde había salido eso!? Nunca le había hablado así... Ni cuando estaban peleados...

Ugh. Sacudió la cabeza tratando de sacar ésa frase de su mente. Quizás el lunes que se vieran en la escuela Kacchan ya estaría mejor...

La fiesta comenzaba en la tarde, era una comida y luego horas y horas de ver caras de gente rica y políticos que Izuku no conocía exceptuando al papá de Todoroki y a sus amigos... Quizás vería a la chica de coleta del otro día, Yaoyorozu-san. Sabía que era rica...

Bueno, no tendría porqué ser una fiesta mala.

Se puso el traje que su mamá le había comprado hace unas semanas con la intención de acudir al evento. Era un pantalón de vestir algo holgado pero bonito en un tono azulado-verdoso, con un chalequito de un tono más claro que el pantalón, con decorados de chakira en la espalda formando dos peces que bailaban entre sí (Izuku los reconoció como Tui y La, los espíritus de la luna y el mar originales), y una bufanda blanca brillante a juego (aunque mal puesta). Se puso una pulsera en el brazo izquierdo, terminando el outfit de forma un poco... Exagerada.

...

Demasiado.

Mejor se quitó la bufanda, viéndose en el espejo...

Así. Perfecto. Sin bufanda.

Cuando se vio listo, salió de su cuarto para encontrar a su madre preparando algo.

— ¿Ya estás listo, Izu...? - Su mamá lo vio y su sonrisa amable se volvió triste.

— ¿Qué pasó, ma? - Parpadeó el niño mordiéndose la mejilla por dentro de la boca. No sabía qué estaba mal con su traje.

— Ah... - Su madre se levantó y le acomodó el cuello del chaleco. — Te ves bien, mijo... - Ella se veía un poco triste, mientras le acomodaba el cabello un poco. — Te pareces a tu papá...

— Ah... - Izuku apretó los labios, viendo para otro lado. Cuando su mamá lo comparaba con su papá no podía evitar sentirse incómodo.

Cuando Inko terminó de arreglar el outfit se acercó a la puerta de su departamento, llegando al Genkan y tomando sus zapatos.

— Izuku, ¿qué te dije de tus tenis? - La mujer preguntó, alzando una ceja con diversión.

— Sí los lavé. - Dijo haciendo un mohín, viéndola con ojitos de perrito mojado.

— ... Izuku, es una fiesta de gala... - La mujer suspiró, negando con la cabeza. — ¿Y los zapatos que te compré hace ya rato?

— Eh... Pero quiero mis tennis...

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⏰ Última actualización: Sep 01 ⏰

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