¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me senté en la repisa que estaba encima de la enorme computadora, dejé que mis piernas colgaran entre las barras mientras veía a Tim y Jason pelear entre sí.
Ambos estaban sin camisa, sin embargo mis ojos sólo estaban en Tim. Mi rollo de canela amante del café.
Me encantó cómo su cuerpo sudaba mientras se movía esquivando y atacando a Jason. Su trasero se sacudió.
Mirando su trasero lo miré hasta que cayó al suelo y Jason ganó. Mientras Tim jugaba en el suelo , grité: —No lo ayudes a levantarse y tú quédate abajo.—
Levantándome rápidamente, bajé corriendo los escalones de metal y me senté sobre el cuerpo sudoroso de Tim.
-No vuelvan tener sexo aquí.— Jason dijo mientras salía de la cueva.
—¿Y? ¿Te gustó lo que viste?—susurró Tim.
—Oh, me encantó mucho.— susurrando cerca de su oído, —Especialmente por tu cuerpo sudoroso y sin camisa. Me recuerda a...—
Sintiendo que algo me golpea el culo, miro sus ojos. Inclinándonos, nuestros labios se encuentran, encajando como piezas de un rompecabezas, separando mis labios. La delgada lengua de Tim se desliza dentro de mi boca.
Nuestra mancha se mezcla antes de que una tos baja nos interrumpa bruscamente. Mirando hacia arriba veo a Bruce parado frente a nosotros.
—¿Podemos ayudarte, Bruce?—Digo mientras Tim se esconde avergonzado.
—No aquí y asegúrense de usar protección.— Dice mientras se hace a un lado y señala hacia la salida.
—¿Lo que estás diciendo es usar protección? Literalmente tuviste un hijo y ni siquiera supiste de él durante diez años. No puedes decir una mierda.— Digo antes de levantarme, levantar a Tim, lo coloco sobre mi hombro y lo llevo fuera de la Baticueva.
