Capítulo 18

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Capítulo 18

Carla

Miro a la mujer que está frente a mí, ya no es la joven a la que solía manipular que hiciera mi voluntad, a la que con solo decir una palabra despectiva de su apariencia podría manejarla.

Ahora solo veo a una mujer que se parece a ella, mis fingidas lágrimas ya no provocan nada en ella. Por ello odio tanto a Grey y Ray; ellos me han quietado ese poder en Anastasia. Ella Me mira desafiante a los ojos, ya no baja la cabeza como antes.

-¡RESPONDEME! ¡Maldición, Carla! ¿En qué mierda pensabas cuando vendiste la información de nuestra boda y fotos nuestras? Es nuestra vida íntima, por ello solo había personas cercanas -Se tapa el rostro con las manos.

-Necesitaba dinero, Anastasia. Me hicieron una buena oferta por esa información y no pude dejarla pasar -Me encojo de hombres.

-¡MALDICIÓN! ¡SOY TU HIJA! Nos has puesto en peligro, no sabes lo que has provocado. Morton nos ha amenazado y ahora también has puesto en peligro a mi... -Sus sollozos no provocan nada en mí.

-Bueno, no tengo la culpa, de que no pudieras mantener las piernas cerradas o tomar anticonceptivos. Yo fui más inteligente con tu padre. Tu concepción fue un...-Levanta el rostro con ira reflejada en él.

-Si eso siempre lo dejaste claro, fui un error, tanto que no entiendo ¿por qué existo? Solo querías usarme como herramienta. Pero te salió mal con respecto a Franklin, él se dio cuenta a tiempo, ¿No es así? -Me levanto de golpe.

-¿Quién te lo dijo? -Ella ríe amargamente.

-Es solo verme en el espejo. Él solo tuvo que ver mi fotografía y saber que tu eres mi madre, para darse cuenta -No estoy logrando nada en esta conversación.

-¿Vas a darme el dinero o no? -La emplazo nuevamente.

-No, Carla. Sigue buscándote un nuevo amante, como siempre lo haces o podría agenciarte un trabajo como una persona normal. Sabes, yo lo hago. Siempre he trabajado -Se encoge nuevamente de hombros. Como odio gesto.

-¡ESTAS, LOCA! Yo trabajar. Tu lo haces porque te da la gana; tienes la fortuna de Ray y la Cristian. Puedes darme el dinero, esa cantidad es una limosna con lo que ahora posees. ¡Soy tu madre, me lo debes, Anastasia! -Se levanta de su asiento y da un golpe en el escritorio.

-Yo no pedí venir a este mundo. Yo no quería ser la herramienta de una mujer ruin y sin escrúpulos. Lárgate de mi casa y no vuelvas, de lo contrario impondré una orden de restricción -Ray entra con un fuerte golpe.

-Largo, no vuelvas o me olvidaré de que soy un caballero. No vuelvas a molestar a mi niña nunca más. De lo contrario te quitaré la subvención que te doy -Me arrastra fuera del despacho de Anastasia.

Miro como Cristian la abraza, la ama y eso me hace odiarla más. Siempre quise que Morton me amara a mí de esa manera. Pero el muy hijo de puta tenía que fijarse en ella, en mi hija. Soy arrastrada hasta un auto, pese a mis protestas.

-Carla, lo que dije adentro es en serio. No busques más a Annie -Me mira decepción.

-Ella no es tu hija -Niega con la cabeza.

-No salió de mí. Pero es más mi hija que tuya. Me gané su amor, su respeto. Siempre estuve para ella, aunque en algún momento la apartaste de mí. Taylor llévala dónde quiera que viva ahora -Cierra la puerta de un golpe y el perro fiel de Grey me lleva a mi departamento.

-Señora Carla, nunca le hecho daño a una mujer, no quiero empezar con usted. Cristian es nuestro amigo, más que un jefe. Si algo le sucede a ella o al bebe. Luke y yo iremos tras usted sin dudarlo -Cierra la puerta, para luego irse por donde vinimos.

EL OTRO LADO DEL ESPEJODonde viven las historias. Descúbrelo ahora