Dear Diary

𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐

Los dos estaban a corta distancia, sus respiraciones chocaban, sus labios estaban a solo unos centímetros de tocarse. La respiración de Rengoku paró, su cuerpo le obligaba a no hacerlo. Akaza al ver cómo el rubio no respiraba , le agarro el mentón con la mano, obligándolo a verlo a los ojos

- Te vas a ahogar si siges sin respirar - dijo mientras veía esos lindos orbes color sol para después separarse y caminar hacia su taquillero.

Rengoku puso una mano en su pecho, sintiendo su corazón latir con fuerza, sus mejillas estaban sonrojadas, su respiración ahora era agitada, muchas preguntas se generaban en su cabeza, '¿Porque Akaza se acercó tanto a el? '¿Porque pensó que lo hiba a besar?'. Esas dudas recorían su mente una y otra vez, decidió no estresarse por tales pensamientos , fué a su casillero y tomó su ropa para después empesarse
a vestir.

Fue directo a la entrada del colegio , se puso sus audífonos y puso una canción en su celular. Caminó hacia fuera de la escuela cuidando de no tener un accidente en el camino.

Después de un recorrido de 1 hora llegó a su casa, entró y fué recibido por un tierno abrazo de su hermano menor.

- Como te a ido en el colegio hermano? - preguntó con la cabeza ahun en el pecho de su hermano mayor.

- nada fuera de lo normal Senjuro, padre está en casa?

- no, salió a hacer las compras, no había comida en el refri y se ofreció a comprarla - dijo el menor separándose de su hermano

- Esta bien, - Kyojuro entró a su casa y fué directo a su cuarto.

Cerró la puerta y fué a el baño de su cuarto, llenó la bañera y se quitó la ropa para después meterse en la caliente agua.

Ese ambiente de relajación absoluta solo lo conseguia apreciar mientras se sumergía en su bañera, donde parecía ser el único lugar tranquilo para el.

Su mente se llenó de pensamientos sobre Akaza, sin duda ese chico lo ponía mal. Por un momento pensó que tal vez en un futuro sean algo, quizás amigos o ... más .Las mejillas del Rengoku se calentaron levemente por tal pensamiento y soltó una pequeña risa enamorada mientras tenía la vista perdida.

- Creo que me estoy enamorando - soltó sin pensar , esas palabras inconscientemente llegaron a su corazón, sonrió levemente pero esa sonrisa se desvaneció al recordar la dura verdad - el me odia, es mejor olvidar todo - soltó un suspiro y salió de la bañera, envolviendo su delgado cuerpo en una toalla.

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Los meses pasaban, dando paso al frío invierno. Los sentimientos de Kyojuro hacia el pelirosa eran los mismos, pero una tristeza en su interior se acumulaba ya que sabía que su amor por el sería rechazado de inmediato por el mismo que robó su corazón.

Los blancos copos de nieve empezaban a caer del cielo, cayendo en el suelo y llenando las calles de ellos.

En estos tiempos Kyojuro se enfermaba mucho, ya que igual que su cuerpo, su sistema inmunológico era igual de débil por eso usaba abrigos más cálidos en los días más fríos.

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Ahora nuestro rubio estaba en el patio de la escuela , sentado en un banco alejado de los demás, ya sabía que era más probable que lo vuelvan a humillar en lugares donde hay más personas por lo que siempre se sentaba alejado de todos.

Estaba temblando de frío, ese día no llevó abrigo ya que en la mañana parecía estar más cálido el día, pero se equivocó , en ese momento estaba nevando , y el aire era seco y frío. El Rengoku trataba de darse calor, para eso soplaba aire caliente a sus manos y las frotaba, pero no era suficiente para el, el frío era como un infierno para nuestro chico , pero de pronto sintió como un abrigo lo tapaba por atrás, dió la vuelta para ver quién fue tal persona que le brindó la prenda y se encontró con el pelirosa.