Todo lo que pido

1 Que aburrido...

Sin dudas es una mañana fantástica, el sol brilla sin quemar la piel y la brisa es tan fresca que el viento juega con mi cabello, tengo muchas ganas de jugar, voy a buscar a mi hermana para jugar, me dirijo a su habitación y la encuentro con sus muñecas.

En otro lugar

Emelion: papá, ¿Podemos ir por un helado?

Papá: Pero nena, aún no terminamos de ayudar a tu mamá

Emelion: ¿Cuándo acabemos podemos ir?

Papá: Si tu mamá está de acuerdo entonces si

Mamá: Para mi no hay problema, en tanto vuelvan a casa antes de la cena

Emelion: si mamá

Papá: ¿No quieres comer helado cariño?

Mamá: No mi amor, estaré en casa y tomaré un café, así estoy bien

Mientras tanto Aaron

Después de tanto jugar mi hermanita Alice se quedó dormida, mi abuela la llevó a su habitación, pero yo aún tengo mucha energía, mamá todavía no llega del trabajo y me gustaría jugar con ella pero tengo que esperar, mi amiga Lissa se fue de viaje con sus abuelos y nadie más en esta calle quiere jugar conmigo...

Abuela: Aaron, necesito que me ayudes en la cocina -dice mi abuela para después alejarse de mi habitación, me pongo de pie y voy a ayudarla-

Estoy aburrido, ¿Todo pinta ser un día aburrido? Desearía tener aventuras como los personajes de las películas que veo, pronto mis pensamientos son callados por un ruido que me cautiva enseguida...