El seco sonido que ralizaron sus pies al tocar el humedo suelo de las alcantarillas fue lo único que oyó despues de que la transmisión se cortara. Mirando con atención su entorno, Reisen solo encontró largos pasadisos oscuros lleno de aguas negras y mamolientes. El chillido de las ratas era lo único que se escuchaba fuera de sus pasos al caminar por aquel lugar. A pesar de encontrarse a oscuras, sus ojos podían ver en la oscuridad y en lugar de un inquietante tunel negro, lo que a Reisen se le presentaba era un rojo brillante que le indicaba que camino seguir y donde pisar con cuidado debido a que aquellas cloacas no solo tenían aguas residuales a su alrededor sino también muchas latas de cerveza, condones usados y varias geringas que algunos drogadictos usaban para inyectarse aquellas sustancias ilegales. Podría considerarse sorprendida si no encontraba un cuerpo mutilado en ese sitio durante su recorrido. Sin embargo eso no importaba ahora sino poder encontrar a su objetivo.
Cerrando sus ojos, Reisen se puso su mano derecha sobre su acongojado rostro al recordar que ella alguna vez fue su amiga. Su hermana
Siempre fue distinta de las demas, mientras que todas sus hermanas de combate crecían con el ideal de servir hasta la muerte a la Reina Lunarian junto a su futura heredera Kaguya, Reisen por el otro lado veía como eran tratadas como si fuesen carne de cañon que podía ser facilmente reemplazada por la siguiente camada de Conejos Lunares sin que a Toyohime, Torihime o la mismisima Reina le importasen un carajos. Sin embargo Kaguya... ella era distinta.
Nunca se lo dijo a nadie y moriría antes de decirlo en voz alta, pero Reisen si sentía admiración y cariño por Kaguya debido a que ella podía ver en la princesa un cambio. Ella era diferente. Sí, era cierto que Kaguya era un poco haragana y solía tener momentos de autentico egoismo, pero Reisen sabía que Kaguya era diferente y eso lo pudo comprobar durante la guerra contra los Youkai en donde en lugar de quedarse sentada en el salón del trono junto a sus padres, se puso las ropas de combate Lunarian y peleó codo a codo con su ejercito para repeler la invasión. A pesar de las protestas de Toyohime, Kaguya peleó en esa guerra y le salvó el trasero a Reisen en varias oportunidades, siendo alabada entre las demas Conejas Lunares y admirada por todos los Lunarians. Se sabía que Kaguya había estado en la tierra durante un tiempo considerablemente largo y habia aprendido varias cosas de una pareja anciana de humanos. Reisen sabía que Kaguya era sumamente astuta y alguien muy valiente. Se rumoreaba entre las Conejas Lunares que cuando estuvo en la tierra Kaguya tuvo muchos pretendientes que no paraban de acosarla, sin embargo ella pudo deshacerse de ellos al enviarlos a buscar reliquias o artefactos magicos a tierras remotas, artefactos magicos y reliquias que la princesa ya poseía. Aquello no solo era una muestra de la astucia de Kaguya sino también una prueba de su valor y de su fortaleza para hacerse con objetos custodiados por bestias que podrían haberla matado sin pensarselo dos veces. Reisen podía dar fe de que sus padres reales jamás habrían salido de su palacio para hacer algo similar a lo que Kaguya hizo. También sabía que pudo humillar a una familía guerrera muy importante dentro de Japón: los Fujiwara, sin embargo... Kaguya no hablaba mucho del tema cuando se encontraba al lado de los demas miembros de la corte y en muchas oportunidades miraba a la tierra con una expresión nostalgica. Reisen no la culpaba debido a que, del tiempo que había pasado en la tierra, ella también había aprendido a amar ese planeta tan distinto de la Luna. Sí, a diferencia de Torihime y su hermana Toyohime o a diferencia del Rey y la Reina Lunarian junto a Eirin, Reisen si daría su vida por Kaguya debido a que en muchas oportunidades la consideraba a algo similar a... ¿Una amiga?
Nunca pensó en esa idea y tampoco era prudente hacerlo en ese momento, pero... recordaba una vez en que Rei'sen se encontraba en peligro, había sido atrapada por un ser muy poderoso que respondía bajo el nombre de Yukari y Reisen fue a su rescate, sin embargo tras haberla rescatado y en mitad del combate, en donde se veía superada en numeros, recibió la repentina ayuda de Kaguya quien le respondió: "Siete a uno, intenta evitar que te supere en el contador conejita." Reisen sonrió en ese momento debido a que suponía que Kaguya estaba jugando en ese momento, a ella siempre le encantaba jugar, un habito que había aprendido cuando estuvo en la tierra, pero ahora que lo pensaba mejor ¿Acaso estuvo a su lado para ayudarla en el combate porque no quería que le pasara nada malo?
Reisen sabía que no era la gran amiga y confidente de la Princesa Kaguya, esa era Eirin a quien casi siempre le pedía ayuda cuando se encontraba en un dilema o problema moral en donde necesitaba de su consejo, pero si era alguien con quien pasaba gran parte del tiempo y fue precisamente por esa leve confianza que Kaguya la recomendó a Eirin para el proyecto "Ojos Lunaticos"
Sí, admiraba a Kaguya y en el fondo moriría por ella, pero al final del día era una Lunarian, posiblemente una totalmente diferente de los demas como lo era Reisen, pero una Lunarian al fin y al cabo. Reisen suponía que dentro de poco el Rey Lunarian junto a la Reina abdicarían y le pasarían el trono a Kaguya, quien implementaría nuevas reglas en la Luna. Internamente le deseaba lo mejor porque Reisen sabía que Kaguya era un cambio necesario, posiblemente uno no muy grande, pero si uno necesario. Aunque cuando recordaba que Eirin era su consejera entonces dudaba de que dicho cambio fuese notable.
A diferencia de Kaguya, Eirin era alguien a quien Reisen no respetaba del todo. De comportamiento frío, especulativo y a veces desalmado, Eirin no temía experimentar con cualquier ser vivo, fuese humano, Youkai o un Lunarian mismo, con tal de conseguir los logros tecnologicos de los que los Lunarian tanto se enorgullecían. Fue Eirin quien le hizo eso en sus ojos y fue Eirin quien experimentó con aquellos humanos antes de que Reisen dijera basta.
Muy en el fondo Reisen temía que a pesar de su valor, su astucia y su fuerza, Kaguya se convirtiese en una gobernante titere bajo el mando de la verdadera cabeza: Eirin. Quien no tenía intenciones de cambiar el estatus quo de la Luna sino de reforzarlo, creando armas de guerra como lo hizo con Reisen hace unos años atras.
Abriendo sus ojos, Reisen dejó de perderse en sus memorias y prestó atención a su entorno, el sonido de unos pasos llamó su atención debido a que sonaban demasiado graves para ser los pasos de un ratón, era ella.
Kaguya era su amiga, Eirin era quien la convirtió en un arma y Rei'sen... era su hermana y la amaba, pero ella no entendía la verdadera naturaleza Lunarian como Reisen la entendía. Ella envidiaba sus ojos mientras que Reisen deseaba a cada minuto arrancarselos porque lo que le sucedió era una abominación. Le costaba trabajo creer que su hermana hubiese traicionado a los Lunarians, quizas la C.I.A, el F.B.I y M.O.O.N lo creyeran, pero no Reisen, jámas Reisen. Era claro para ella que su hermana era una doble agente y eso le hacía preguntarse ¿Por qué?
Los humanos no habían hecho nada malo, Reisen fue la carcelera de ellos y tuvo la oportunidad de hablar con los tres, pudiendo conocerlos mejor, conocer la tierra mejor y conocer un modo de ser y de pensar distinto que se aproximaba a sus deseos internos. Posiblemente sus feromonas de Coneja también actuaron en secreto, debido a que deseaba internamente a los humanos que allí estaban, pero lo cierto era que sus dichos sobre la tierra le fueron tan maravillosos que ella misma decidió desertar. No por ser una cobarde sino porque no era un monstruo. Y ahora debía enfrentar a quien llamó hermana en el pasado por el planeta que llamaba hogar en el presente.
Siguiendo el sonido de los pasos, Reisen se preparó para el combate entrante.
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REISEN AGENTE DE M.O.O.N
ActionEl alunizage en 1969 fue un gran exito, sin embargo en 1970 ocurrió un evento del que nadie estaba enterado, tras un tercer viaje a la luna, se descubrió que está estaba habitada. Sin embargo los astronautas lograron salir de allí a salvo, solo que...