(...)
- Sientate aqui. - Gritó Kelsey al verme mirar a todas las mesas de mi alrededor
Me sentia como un bicho raro.
Todos los dias que habian transcurrido habia desayunado en el ultimo baño de chicas. Y ahora me sentia nerviosa por sentarme con una chica que al menos ya conocia
La cafeteria del instituto era inmensa. Y todos parecian tener sus lugares de nerd o ñoños:
1.- Las populares porristas
2.- Los chicos del equipo de fotball
3.- Las imitaciones de las populares
4.- Los hormonas calientes que solo pensaban en tener sexo
5.- Los lectores (Tal vez con ellos me vendria bien sentarme)
6.- Los tecnologicos
7.- Los nerds
9.- Los raros
10.- Personas normales como Kelsey
11.- Solo habia mesas sobrantes en las esquinas de la cafeteriaNo no.
Tras-pie
Nuevamente.
La cafeteria retumbo en risas.
Suspiré.
No llores no llores.
La mesa de chicos amigos de Kelsey, me rodearon y me ayudaron a levantarme.
-¿Estas bien?. - Oh santa mierda de todas las mierdas. Su voz era:
P-E-R-F-E-C-T-A
Su cabello castaño estaba totalmente desordenado, su sonrisa era tan blanca como las nubes y sus ojos marrones hacia verse el color más bonitos de ojos en la cafeteria
Senti mis mejillas arder.
- Ss-ii. - Tartamudeé. - Solo tengos dos pies izquierdos
- Buenos pies izquierdos. - Relamió sus labios. Y su vista se dirigio hacia mis zapatillas de colegio
- Mmrhhg. - Kelsey arregló su garganta. - Te presento a Aaron. - Sonrió. - Aaron ella es Ámber. - Aaron sonrió mientras inspeccionaba a todos los de la cafeteria quienes habian guardado silencio cuando Aaron se giró hacia ellos al verlos con frialdad
- ¿Iras?. - Mordió su labio inferior
- ¿Perdón?. - Arqueé una ceja
- Habla de que si iras al juego de atracciones mecanicas. - Kelsey encogió sus hombros. Asentí
- Eso es genial. - Replicó. Dios mio. Yo estaba boba en su enorme y hermosa sonrisa. - ¿Llevas mucho aqui? No te me haces muy conocida
- Yo los dejo. - Kelsey me miró maliciosa. Y se alejo hacia su mesa donde los chicos estaban murmurando mientras nos observaban con timidez
- Am, soy nueva. - Encogí mis hombros
- Uhh, con que la nueva. - Hizo una mueca. - Debe ser dificil. - Lo interrumpí
- Bueno es dificil cuando los chicos y chicas son crueles contigo. Que en mi caso no lo es. - Un chico tiró su plato de avena en mi cara. - Ahhh. - Grité. La avena estaba caliente. Demasiado caliente
Mi cara quemaba y tal vez estaban brotandome ronchas en mi rostro. Aaron me miró sorprendido, y a su vez desesperado
Esta vez la cafeteria volvió a estallar en risas.
No llores por favor. No
Las lagrimás escurrian por mi rostro con rapidez
- Ámm.. - Intento quitarme algunos de los rastros de semilla de avena en mi rostro.
- Callense. - Gritó Kelsey hecha una furia. - Ámb.. - Me llamó. La ignoré y sali corriendo
No sin antes..