Shadybug y Clawnoir (Dos Universos)

5. La casa de los Agreste 2

~Marinette

Salimos de su baño con las caras más limpias y pude jurar que se veía genial.

Él se me quedó mirando con los labios entre abiertos y un suave rubor en sus mejillas.
—Que?

—Eres mucho más guapa de lo que me imaginaba, my lady.
Me quedé mirándolo dulcemente, no podía controlar mi cuerpo y eso me molestaba.

—Aunque no más que yo.
Añadió. Ahí estaba el Adrien que yo había conocido.

Agarré mis muletas de nuevo hasta que llegué al sofá.

—Donde vas?
Preguntó

—A dormir, gato tonto.
Contesté.

—Estas loca si piensas que voy a dejarte que duermas en el sofá estando herida.

—No quiero que duermas en el incómodo sofá por mi presencia.

—Insinuas que duerma contigo.
Volvío a sonreír con esa sonrisa tan tonta suya.

Yo rodé los ojos (algo sonrojada)¿Que te pasa Marinette?

—Tu cama es grande. No tenemos porqué dormir juntos. Yo a un lado y tú a otro. Y si puede ser, no te me acerques demasiado, a ver si este gato tiene pulgas.
Me reí de él.

—Muy graciosa, sandía.
Lo ignoré.

Me senté a un extremo de la cama cuidadosamente y coloque las muletas en el suelo, metiéndome en las sábanas.

~Adrien

No me lo podía creer. Iba a dormir con la chica que me gustaba. Y llevaba mi camiseta.

—Tenemos que hablar a ver qué hacemos con la villana.
Sugirió ella.

—Si no recuerdo mal, Chatnoir me contaba que Ladybug era la de los planes locos, y tu correspondes a su papel en este universo.

—Siempre tan amable.
Rodo los ojos.

—No tengo ni idea. Tendríamos que hablar con el señor mariposa para confirmar que "esa cosa" no es suya.

—Adrien, es obvio que no es suya. Es demasiado blando como para hacer eso a un aliado con nosotros.

—Pero no sabemos quién es para ir decírselo.
Añadí yo.

Hubo un silencio.

—Pero podemos atraerlo.
Me miró por fin.

—Haremos alguna trastada para llamar su atención, vendrá, y le contaremos lo que me pasó.

—Ya. Y piensas hacerlo con la pierna y el brazo roto? Estarás así por una temporada.

—Ahg! Como se nota que eres idiota! Nuestros trajes son mágicos, especiales. Mientras usé mi traje no sentiré el dolor, ya que llevaré debajo la escayola que me puso Nathalie. Será como si nada hubiera pasado.

Que lista era! Por eso me gustaba.

Hubo otro silencio. Y ella bostezó.

—Hablamos de esto mañana mejor. Que duermas mal y tengas pesadillas gato tonto.

—Igualmente sandía.
Cerré mis ojos. Abrí un poco mis piernas, buscando la pierna de Marinette con una de ellas. Y la encontré. Recordé que me dijo que no quería que la tocará pero al hacerlo ella puso su pie encima del mío. Y me sonrojé.

—Será una excepción.
Dijo ella. Y yo reí. Me sentía genial. Como nunca me llegué a sentir desde lo de mi madre.

~Marinette

Entre a clase y vi a Marinette y Alya sentadas en la mesa, me vieron y dijeron de sentarme con ellas.

—Marintte! Tengo que hablar contigo.
Me dijo Marinette. Si sonaba raro. ¿Que hacia la Marinette de el otro universo aquí?

Salimos del aula y comenzó a hablar. De repente estábamos transformadas.
—ChatNoir y yo vinimos por una misión aquí, pero vi a él y Clawnoir hablando de nosotras!
Me miró emocionada.

A lo lejos vimos como los dos gatos se acercaban.

Clawnoir me tomó de la mano y la beso.
Me abrazó fuerte, tanto, que casi no podía respirar. Separé mi cabeza de su pecho.

—My lady.
Fue lo único que dijo. Empezó a acercarse poco a poco. Nuestras narices se tocaban y notaba su respiración cerca de mi cara.

Y me desperté.
No podía moverme mucho por la escayola. Bueno, o al menos pensaba que era solo por eso.

Adrien me abrazaba por la espalda. Agarraba mi mano no herida y con la otra me rodeaba la cintura, mientras nuestras piernas se entrelazaban.
Intenté moverme, pero fue en vano ya que eso causó que me agarrara más fuerte hacia él.
De verdad estaba dormido? Porque como fuera consciente de sus actos, está vez si que le rompía la mesa en su cabeza.
Pero no. Él realmente estaba dormido. Podía notar su respiración en mi cuello.

Siendo sincera, no me molestaba tanto como lo imaginaba, osea, ¡nunca me lo había imaginado!¡Ay!
Mejor ya paro.
Únicamente se sentía agradable saber que le gustas a una persona importante en mi vida, porque si, él realmente era importante.

Vi a Plagg, que me observaba y rápidamente notó mi situación. Y empezó a hacerle cosquillas en la oreja a Adrien para que despertara.

~Adrien

Noté unas cosquillas en mi oreja y levante una de mis manos para calmar el picor de esta.
Cuando lo hice, volví a dejar caer mi mano donde antes y noté un ser humano.

Un ser humano que yo abrazaba fuertemente. Un ser humano que seguramente quería golpearme.
Me aparte finalmente por el susto.
Me asomé a verla. Y ella repentinamente se giró con los ojos cerrados. Dormía.

Uff. Menos mal. Me quedé observando su fantástica belleza detrás de todo ese oscuro maquillaje. Puse un mechón de pelo tras su oreja y...

—BOO!
Me asusté tanto que me caí de la cama.

—Perdona! Pensé que dormías!
Dije rápidamente.

—Ya, lo he notado.
No paraba de reírse. Yo sonreí tontamente.
Había dormido abrazado a ella, y ella no se había quejado.