Capítulo 3: Cruce de Caminos

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El sol se alzaba sobre Konoha, anunciando el inicio de un nuevo capítulo en la vida de Naruto. Era el primer día de la academia ninja, y el joven rubio estaba lleno de nervios y emoción. Kushina, su madre, lo acompañaba, deseándole suerte y asegurándose de que todo estuviera listo para su primer día.

Kushina: "Naruto, ¿estás listo para comenzar esta nueva etapa? Estoy tan orgullosa de ti."

Naruto: "¡Sí, mamá! ¡Estoy muy emocionado!"

Ambos se dirigieron a la Torre Hokage, donde se llevaría a cabo la ceremonia de inicio. Mientras Naruto y Kushina entraban en el edificio, Ayame estaba allí para entregar una bandeja de comida especial al Hokage, Minato, quien estaba ocupado revisando algunos documentos.

Ayame(pensando): *Perfecto. Este es el día ideal para acercarme a Minato. Con la presencia de Kushina y Naruto aquí, será el momento perfecto para hacer mi movimiento.*

Ayame se acercó al despacho de Minato, llevando una bandeja de comida preparada con esmero.

Ayame: "Hola, Minato-sama. Pensé que podrías necesitar un pequeño descanso y algo de energía antes del ajetreo del día."

Minato levantó la vista de sus papeles, sorprendido por el gesto.

Minato: "Ayame, muchas gracias. No tenía idea de que estabas viniendo."

Ayame: "Era una sorpresa. Quería asegurarme de que tuvieras algo para disfrutar antes de que empiece la ceremonia."

Kushina y Naruto estaban esperando en la entrada de la Torre Hokage, observando a Ayame y Minato desde la distancia. Naruto estaba ansioso por comenzar, y Kushina estaba llena de orgullo y emoción.

Kushina (a Naruto): "Estoy tan feliz por ti, Naruto. Vamos a esperar aquí mientras Minato-sama termina su trabajo."

Ayame se acercó a Minato con la bandeja, mientras él se preparaba para tomarse un breve descanso.

Ayame: "He preparado algo especial. Espero que te guste."

Minato aceptó la comida y la degustó, elogiando a Ayame por el buen sabor.

Minato: "Esto es delicioso, Ayame. Gracias por el detalle. Realmente aprecio tu amabilidad."

Ayame: "Me alegra que te guste. He estado esperando este momento para hablar contigo un poco más."

Minato, complacido por la conversación, le sonrió y la invitó a quedarse un poco.

Minato: "Si no te importa esperar un momento, podríamos charlar mientras disfruto de esto. El día está siendo bastante agitado."

Ayame asintió y se acomodó en una silla cercana. Mientras conversaban, Ayame usó su encanto para acercarse a Minato de una manera que no había hecho antes. Su intención era mostrarle una faceta más personal y cercana.

Ayame: "Debo decir que admiro mucho la forma en que manejas tus responsabilidades. No es fácil ser Hokage y, al mismo tiempo, mantener una familia unida."

Minato se mostró sorprendido y halagado por el comentario.

Minato: "Gracias, Ayame. No siempre es fácil, pero lo hago porque creo en el futuro que estamos construyendo."

Ayame: "Eso es lo que más admiro de ti, Minato-sama. Tienes un corazón grande y una gran responsabilidad sobre tus hombros."

Mientras continuaban hablando, Kushina observó desde la entrada, notando la cercanía entre Ayame y Minato. Aunque no parecía haber nada inapropiado, no pudo evitar sentirse un poco inquieta. Sin embargo, decidió no interferir, permitiendo que la conversación siguiera su curso.

Ayame, en su mente, estaba calculando cada movimiento para asegurar que Minato se sintiera atraído y cómodo con ella. Mientras la conversación se volvía cada vez más íntima, Minato empezó a notar una chispa de atracción que no había anticipado.

Ayame: "A veces, me siento como si todos me viesen solo como una camarera. Pero estar aquí contigo, ver tu dedicación y tu pasión... me hace sentir que puedo ser algo más."

Minato, tocado por sus palabras y la sinceridad en su voz, se sintió más cercano a Ayame. La conexión que estaban desarrollando se hacía cada vez más evidente.

Minato: "Ayame, no eres solo una camarera para mí. Eres alguien especial que aporta mucho a nuestras vidas."

Ayame sonrió, sintiendo que su plan estaba avanzando según lo previsto. Sabía que el siguiente paso era reforzar esta conexión y aprovechar cualquier oportunidad que se presentara.

Con la llegada de la hora de la ceremonia, Minato se despidió de Ayame, agradeciéndole una vez más por el gesto y la compañía. Naruto, emocionado, se dirigió a su primer día en la academia ninja, mientras Kushina y Minato se preparaban para el evento.

Ayame, mientras tanto, ya estaba trazando los siguientes pasos de su plan, decidida a seguir avanzando sin importar el costo.

Continuará...

Naruto traicionado por ayame Donde viven las historias. Descúbrelo ahora