The Lovers. DILFS

025. In the mood for somethin sweet - Jason Momoa

Autor Original:  curvykittyyssmutfics

En Tumblr

"¡Dios, su pelo es una maldita jungla!", piensas mientras te colocas el peine de cola de rata entre los dientes y buscas el desenredante. Sus ojos te miran sin saberlo en el espejo, apreciando tu figura curvilínea, pero tú estás demasiado ocupada tratando de desenredar sus deliciosos mechones rubios con puntas. Es un verdadero desafío no resoplar tu irritación porque nunca se cepilla el maldito cabello. Como su peluquero personal, sabes que es un hecho que si no lo haces, no se hace.

Moviéndote detrás de Jason, separas su cabello y comienzas por el frente. Estás tan concentrada en sujetar su cabello desde la raíz mientras lo peinas para evitar lastimarlo, que no te das cuenta de que sus ojos recorren tus jugosas tetas frente a su rostro. Se lame los labios y te mira continuamente mientras te acercas para tener un mejor acceso.

Percibes su colonia y te cuesta un poco no tocarle el cuello con la nariz. Maldita sea, ¿por qué este hombre tan guapo te seduce en cada cita sin siquiera intentarlo? ¿Cuántas veces saliste de la tienda con un dolor punzante entre las piernas, deseando que se fuera a casa contigo?

Diablos, no tenía ningún sentido que los chicos todavía no hubieran follado. Esta tontería de ir despacio iba a ser tu muerte. Pero la forma en que te acariciaba el coño siempre te llevaba a otra dimensión, te hacía preguntarte en qué más era bueno. Te has despertado de demasiados sueños húmedos de lo que esa boca podría hacer.

—Dios mío, Jase... ¿Por qué no te cortas todo esto? Es obvio que no lo quieres. —Tu irritación por su flagrante falta de respeto hacia su cabello sale a la luz sin tu permiso.

—¿Por qué haría eso si me da una excusa para ir a verte, cariño? —responde Jason con una risa cordial.

Te sientes absolutamente patética porque el apodo te revuelve el estómago y te arde el calor en las mejillas. Estás muy contenta de no poder sonrojarte. No tienes ningún problema con tu rutina habitual de evitar el contacto visual durante las citas, pero luego correr a casa para frotarte el coño pegajoso después de que él se va.

"No es posible que te guste venir a mi peluquería todos los viernes por la tarde, ¡es fin de semana! ¿No tienes planes?", preguntas mientras pasas a peinarle la parte delantera del cabello.

—Sí, tengo algo muy divertido en mente para esta noche, en realidad. —Se lame los labios mientras habla, con una voz peligrosamente baja mientras continúa mirándote a través del espejo con ojos penetrantes.

Tu mente se acelera mientras te preguntas en qué podría estar a punto de meterse. ¿Tal vez planes para una noche en solitario? Es difícil no imaginarlo solo en la cama, con el cuerpo reluciente de sudor mientras bombea su polla gorda desesperadamente. ¿Gime fuerte cuando está solo? Te preguntas si le gusta provocar y llegar al límite... No, piensas, parece del tipo que va directo a esa nuez. Joder, sabes que debe correrse a mares. La idea hace que tus muslos se aprieten involuntariamente una y otra vez esperando algo de alivio. Simplemente SABÍAS que tenía una polla monstruosa que podría follarte hasta el olvido. Tus manos se mueven en su cabello instintivamente, mientras sueñas despierta con tu sexy y fornido cliente.

Jason no se da cuenta de esto. Te observa en el espejo mientras tu pecho sube y baja un poco más rápido, y una ligera transpiración comienza a cubrirte. Te mordisqueas el labio de una manera que le hace querer abalanzarse sobre ti, mientras sigues frotando esos muslos gruesos. Él SABE que el centro de tu piruleta es jodidamente dulce.

"... ¿Cariño?"

Solo captas el final de su frase gracias a tu maldita imaginación. Joder, estás avergonzado. Nunca has estado tan dispuesto a que te follen.