Tdoong School - Twice

¿Tregua?

Dahyun se encuentra recargada en un banca en el jardín principal de la escuela, está esperando que den las seis para ir a la reunión que la presidenta convocó. Suspira con pesadez y un bostezo está a punto de salir de su boca cuando ve al chico de la última vez.

Tiene las mangas dobladas hasta sus codos, unos lentes protegen sus ojos de los pequeños trozos de pasto que vuelan al pasar la máquina por lo que ha crecido demasiado y tiene puestos unos audífonos de diadema. Dahyun sonríe y se pone cómoda, para disfrutar de la vista.

Cuando levanta la máquina sus brazos se flexionan y ella solo puede sonrojarse ¿cuál era su nombre? ¿Eun? ¿Woon-?

Un susurro interrumpe sus pensamientos —¿Con el jardinero? —la voz de Momo hace que se exalte y pegue un pequeño brinco.

—¿Qué? —pregunta confundida y cuando intenta mirar al chico otra vez ya se ha ido.

—¿Te estás echando taquito de ojo con el jardinero? —Momo dice con una sonrisa, sentándose a su lado y ofreciendo su vaso con fruta. Dahyun niega amablemente —Digo, es guapo pero no creo que a la Directora le agrade qu-.

—No sé de qué estás hablando, Momo —El tono de Dahyun es muy serio para su actitud habitual, y con eso Momo decide dejarlo por el momento. —En fin, ¿tú sabes que pasó anoche realmente?

Momo rasca su cabeza ¿qué no pasó? —Honestamente fueron muchas cosas, lo del baño fue un accidente y eso desató todo lo demás. No sé de dónde salieron los rumores.

—Mmmm, pues no lo sé. Que Jihyo nos quiera juntar sabiendo las diferencias que ustedes tienen se me hace muy raro, hasta el extremo. ¿Y si tu y Jeongyeon se terminan agarrando a golpes?

—Ja! Ya quisiera la pendeja esa que yo le agarrará algo, Dubu.

Dahyun está a punto de decir algo cuando escucha un alboroto, normalmente no le importaría pero cuando escucha el nombre de Mina y la palabra "puta", no solo ella se pone de pie, sino también Momo.

Caminan a donde está el bullicio no muy lejos de las jardineras, hay un pequeño grupo afuera del edificio de artes. Pueden ver que Mina está roja y sino fuera porqué Dahyun la conoce desde que tenían siete años no se hubiera dado cuenta de cómo intenta aguantar las lágrimas.

Un grupo de chicos y chicas la bombardean con preguntas y los guardaespaldas de Mina intentan alejar a los estudiantes hambrientos de respuestas. —¿Con quién más te acuestas?

—¿También le das a Jihyo?

Momo escucha esas palabras viniendo de aquellas personas y siente enojo, son solo tres compañeros del mismo semestre que ellas. Los guardaespaldas de Mina impiden que lleguen a ella y Momo podría irse, podría dejar que se la coman viva, podría pensar que se lo merece.

Pero no, ella estuvo en ese baño también y aunque no conoce más allá de que Mina es un dolor en el culo no puede evitar sentir su sangre hirviendo. Así que antes de que el alumno desconocido siga diciendo cualquier estupidez, lo toma por los hombros de manera brusca y lo obliga a que lo mire.

El chico la mira con temor en sus ojos —Repite lo que dijiste —La voz de Momo es seria y baja, sus ojos reflejan una amenaza silenciosa.

—Y-yo yo.

—¿Quién crees que eres, escoria? No creas los rumores que dicen por ahí, por qué te puede ir muy mal.

—Momo —la mencionada se sorprende al escuchar la voz de Mina, gira su cabeza y ha emergido de nueva cuenta con su rostro estoico e inalcanzable —, déjalo no vale la pena.

—No me digas que hacer, Myoui —Momo rechina sus dientes, volviendo su atención al igualado que tiene enfrente.

—Jihyo ya nos está esperando.