🌼Flor De Invierno🌼

cap 6

después de salir unos minutos para poder encontrar algo que pueda servir.

Yuki regresó a la cueva con el corazón palpitante y la mente con posibles situaciones y como lograr transportar a kira sin que corran ningún peligro .

La imagen de Kira siendo atacada y quedando herida, aún la atormentaba, pero sabía que no podía rendirse.

La lucha contra el demonio había sido solo el comienzo, y la oscuridad del bosque parecía intensificarse a cada minuto que pasaba, su cuerpo estaba agotado y apenas llevaba unos días de entrenamiento, aunque antes de eso sabia lo básico del uso de la espada facilitando su aprendizaje, aún necesitaba entrenar más de puro milagro pudo enfrentar al demonio.

Al estar dentro de la cueva, encontró a Kira en la misma posición en la que la había dejado, pero su respiración era aún más débil. Yuki se arrodilló a su lado, sintiendo una mezcla de miedo y desesperación.

—No te preocupes, Kira. Estoy aquí —susurró Yuki, acariciando suavemente el pelaje de su amiga está le respondió con un suave aullido

Mientras trataba de mantener la calma, un ruido sutil resonó en el exterior de la cueva. Yuki se tensó, su instinto le decía que había algo o alguien acercandose . Sabía que el bosque estaba lleno de demonios, y no podía permitirse ser sorprendida de nuevo.

—¿Qué más puede haber en este lugar, no puede empeorar mi situación cierto? —murmuró para sí misma un poco fastidiada, mientras su mente corría en busca de una solución las posibilidades de salir en este momento y salir ilesas era casi nula, y la noche no era mas que otra desventaja.

Posicionando a Kira atrás de ella al sentir una presencia acercandose con una presencia que daba a entender que no era para nada bueno, con un profundo suspiro, Yuki se levantó y se acercó a la entrada de la cueva. La oscuridad parecía palpitar, y el aire estaba cargado de una tensión palpable. Sabía que debía estar lista para cualquier cosa.

De repente, un sonido fuerte y abrumador para alguien común emergió de las sombras, y una figura se deslizó hacia la cueva. Era un demonio, similar al que había enfrentado antes, pero este era más grande y más feroz. Sus ojos brillaban con una luz roja intensa su cuerpo de un color grisáceo, y su aliento era un vapor caliente que llenaba el aire con un olor nauseabundo.

—Otra pequeña presa —ronroneó el demonio, su voz resonó en la cueva. —¿Crees que puedes esconderte de mí, tu sangre huele deliciosa además es sangre especial.

Yuki sintió que su corazón se hundía, pero no podía dejar que el miedo la dominara. Recordando la katana en su mano, se preparó para luchar una vez más.

—¡No te dejare escapar con vida! —gritó, desenvainando su espada con determinación. Las llamas comenzaron a danzar a su alrededor, iluminando el oscuro espacio de la cueva.

El demonio soltó una risa burlona, sus garras afiladas brillando en la penumbra. —Tu valentía es admirable, pero no será suficiente.

Sin esperar más, el demonio se lanzó hacia ella con una velocidad aterradora. Yuki se movió rápidamente, esquivando su ataque y contraatacando con un golpe de su katana siendo empujada por la fuerza ejercida del demonio.

El choque fue brutal. Yuki sintió la fuerza del demonio empujándola hacia atrás, pero se mantuvo firme, recordando la necesidad de proteger a Kira y a ella misma. Con cada movimiento, su katana cortaba el aire, y las llamas se elevaban, iluminando el rostro enojado del demonio.

—No te tengo miedo, tu vida acabará hoy dia —dijo Yuki, su voz resonó con fuerza.

El demonio gruñó, y con un movimiento ágil, intentó atraparla con sus garras. Yuki se agachó justo a tiempo, sintiendo el aire caliente pasar sobre ella. Aprovechando la oportunidad, giró sobre sus talones y lanzó un ataque hacia el costado del demonio logrando golpearlo con su pierna y girando la katana en su mano realizando una postura de la respiración de la llama, la llama de su katana dejando una estela brillante de colo anaranjado y rojo.

El demonio gritó de dolor, retrocediendo por un momento. Pero sus ojos rojos brillaban con furia, y Yuki sabía que no se detendría tan fácilmente.

—Eres fuerte, pero no puedes ganar —dijo el demonio, recuperando su compostura. —Este bosque me pertenece, y tú no eres más que una intrusa.

Yuki sintió que la desesperación comenzaba a apoderarse de ella, pero recordó la promesa que le había hecho a Kira. No podía rendirse. Con un grito de batalla, se lanzó hacia el demonio una vez más, su katana envuelta en llamas.

El combate se intensificó, cada golpe resonando en la cueva como un eco de su lucha. Yuki se movía con agilidad, esquivando los ataques del demonio mientras buscaba una apertura. Sabía que debía encontrar su punto débil.

En un momento de distracción de el demonio yuki se agachó y barrio los pies de a quel ser dejándolo caer, el demonio mas que frustrado encorvo su torso usando sus manos de apollo para saltar hacia arriba llegando al techo y usando lo de impulso para volver a atacar a yuki, la aprendiz se posiciono para atacar, elevó su katana a la altura de su hombro y inclinado levemente su torso.

Parecía que el tiempo se ralentizó

Finalmente, en un momento de claridad, recordó las enseñanzas de su maestro sobre los demonios.

Con un movimiento decidido, Yuki concentró toda su energía en su katana, canalizando su fuerza en un solo ataque.

—¡Respiración de la llama, tercera postura! —gritó, desatando una ola de fuego que se abalanzó hacia el demonio.

El fuego lo envolvió, y el grito del demonio resonó en el aire, un sonido que combinaba dolor y furia. Yuki no se detuvo, continuando su ataque hasta que el demonio se retorció en el suelo, consumido por las llamas.

Cuando finalmente el silencio se instaló en la cueva, Yuki cayó de rodillas, agotada pero aliviada. La amenaza había sido eliminada, pero el precio había sido alto. Kira seguía allí, luchando por mantenerse consciente y ella recibió muchos rasguños con algunos golpes.

—Lo logré, Kira... —susurró Yuki, mientras se acercaba a su amiga.

Con manos temblorosas, Yuki comenzó a buscar en su bolsa algo que pueda ayudarle.

Sabía que debía actuar rápido, pero la fatiga comenzaba a hacer presencia  en su cuerpo. Mientras trabajaba, su mente se llenaba de pensamientos sobre lo que había enfrentado.

El bosque estaba lleno de demonios, y ella estaba sola en su lucha. Pero no podía permitir que eso la detuviera. Kira dependía de ella, y haría lo que fuera necesario para protegerla.

Debían sobrevivir asta el amanecer

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Buenos días/tardes/noches
Espero se encuentren bien aquí estoy con un nuevo capítulo, perdonen si la pelea está horrible, no soy la mejor escribiendo peleas pero se intenta.

Muchas gracias por llegar hasta aquí

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Les dejo una foto de el guapo de giyu

Besos 🌹