"¡No se preocupen, solo es un suceso natural!" dijo Dalton con una calma inquietante.
"¿Cómo que solo es algo natural? ¡Esto está escrito en los pergaminos!" gritó Haruto, mirándolo con incredulidad.
"Esos pergaminos son solo cuentos. Nada de eso es real, son historias para niños," respondió Dalton con desdén.
De repente, el caos exterior se calmó abruptamente.
"Bueno, ya que esto pasó, sigan el camino central. Nos llevará al Parque Sefir," instruyó Dalton, tratando de retomar el control de la situación.
"¿Y cómo sabemos que debemos confiar en ti?" preguntó Haruto, aún desconfiado.
"Tranquilo, Haru," susurró Alex en su oído, "no tenemos a nadie más en quien confiar ahora. Solo nos queda esperar que Dalton sea de fiar."
Mientras nos dirigíamos al parque, el suelo comenzó a temblar nuevamente. Sofi, que estaba caminando delante, cayó en un hoyo que se había formado por el terremoto.
"Sofi!" gritó Haruto, corriendo hacia ella.
Dalton, sin perder la calma, buscó rápidamente algo para ayudar. Finalmente encontró una cuerda y corrió de vuelta hacia el hoyo.
"¡Agárrate de esta cuerda!" dijo Dalton mientras lanzaba la cuerda hacia Sofi.
Sofi se aferró a la cuerda mientras el hoyo comenzaba a cerrarse.
"¡Apúrate a tirar de la cuerda!" ordenó Haruto, con voz cargada de urgencia.
"Eso es lo que estoy haciendo," respondió Dalton, tirando con todas sus fuerzas.
"¡Déjenme ayudar!" ofreció Alex, uniéndose al esfuerzo.
"Yo también les ayudaré," dijo una voz inesperada. Nos volvimos para ver a un nuevo aliado que se había unido a la operación de rescate.
Juntos, tiramos de la cuerda con fuerza. Justo cuando Sofi estaba a punto de salir, el hoyo se cerró parcialmente, atrapándole un pie.
"¡Aaaahhh!" gritó Sofi, su voz llena de dolor.
El pie de Sofi fue atrapado por el borde de la tierra mientras la sangre comenzaba a brotar. Haruto, con el corazón en un puño, trató de atender la herida.
"Tranquila, todo saldrá bien," dijo Haruto, tratando de calmarla mientras trabajaba en la herida.
"¿Cómo puede salir bien? ¡Está saliendo demasiada sangre y me falta un maldito pie!" respondió Sofi, su voz llena de desesperación.
Dalton le pasó a Haruto un pedazo de tela. "Aquí, usa esto para la herida," dijo.
"Gracias," respondió Haruto, tomando la tela y aplicándola sobre la herida para detener el sangrado.
Tras un tiempo agonizante tratando de calmar el sangrado, Haruto miró a Sofi con preocupación. "Ya está todo bien... Sofi, ¿estás ahí? ¡Sofi!" gritó mientras intentaba despertarla.
"Sofi... Sofi..." balbuceó, su voz quebrada mientras le daba suaves golpes en la mejilla.
"¡Cállate!" gritó Dalton, tratando de calmar a Haruto. "Solo está inconsciente. Mantén la calma y atiende la herida bien."
Mirando alrededor, Dalton señaló una casa cercana. "¡Miren! Allí hay una casa. Vamos a refugiarnos allí hasta que despierte," dijo con voz autoritaria.
"¡Ayúdenme a levantarla!" ordenó Dalton mientras comenzaba a mover a Sofi hacia la casa.
Haruto y Alex, aún en estado de shock, ayudaron a Dalton a transportar a Sofi, esperando que la seguridad del refugio les diera tiempo para atender la grave situación.
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La ultima Esperanza
FantasyEn un mundo devastado por el caos y la destrucción, La Última Esperanza te sumerge en una historia épica de supervivencia, coraje y esperanza. Tras un apocalipsis que ha arrasado su ciudad, un grupo de jóvenes valientes se enfrenta a lo desconocido...